La producción de cocaína alcanzó récords históricos en 2020 y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió sobre un repunte durante la pandemia de Covid-19. Bolivia registró un aumento del 15 por ciento en hectáreas cultivadas.
De acuerdo con el Informe Mundial sobre Drogas de 2022, publicado la presente jornada por la Oficina de Naciones Unidas para la Droga y el Delito (Onudd), al menos 21,5 millones de personas consumieron cocaína en 2020, lo que representa el 0,4 por ciento de la población mundial entre 15 y 64 años.
Sin embargo, el consumo no fue el único criterio evaluado por la entidad encargada del control de estupefacientes; la producción de cocaína también fue analizada y los datos registraron un máximo histórico en 2020 de 1.982 toneladas.
Esta cifra representó un aumento del 11 por ciento en comparación al año anterior, sin embargo, lo que llama la atención es que el récord de producción se batió aunque el área global de cultivos casi no presentó cambios en 2020, en realidad, redujo un cinco por ciento en relación al 2018, según informaron medios internacionales.
Pese a que países como Colombia registraron una reducción de áreas cultivadas de al menos siete por ciento, en contraposición, Bolivia registró un aumento significativo de 15 por ciento según los datos publicados por el reporte de la Onudd.
La producción de coca es un tema que fue analizado por el Gobierno con anterioridad, en marzo de este año el Presidente del país, Luis Arce Catacora, anunció que se propuso destruir al menos 10.000 hectáreas de cultivos ilegales esta gestión como una medida contra el narcotráfico.
«Este año planteamos la erradicación de 10.000 hectáreas y, si seguimos con el ritmo actual, considero que podremos superar este objetivo y demostrar una vez más a la comunidad internacional lo exitoso de nuestro modelo de erradicación», destacó Arce en un discurso durante un acto en el Trópico de Cochabamba, una de las principales zonas productoras de hojas de coca de Bolivia.
Sin embargo, según un informe emitido por la Onudd en agosto del año pasado, Bolivia registró el mismo porcentaje de incremento en cultivos de coca destinada a ilícitos, pese a la eliminación de 25.500 hectáreas en 2019 a 29.400 hectáreas en 2020.
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