Tres personas murieron y otras 14 resultaron heridas durante un tiroteo ocurrido la madrugada de la presente jornada en una discoteca de la localidad de Chattanooga, en el Estado norteamericano de Tennessee.
Este último hecho de violencia se suma a la dramática “escalada” de violencia, especialmente con armas de fuego que atraviesa Estados Unidos, mientras se trata de encontrar alternativas para regular la distribución y fabricación de armamento.
La Policía recibió el primer aviso del tiroteo a las 02:45 hora local, y cuando los agentes llegaron al lugar encontraron varias víctimas a las que prestaron atención sanitaria, según informó a CNN el portavoz policial, Jeremy Eames.
Un total de 14 personas presentaron heridas por impacto de bala y otras tres resultaron heridas tras ser atropelladas por los vehículos en los que la gente trataba de escapar de la escena. Dos de los fallecidos fueron producto de los proyectiles, y otro por ser arrollado, según informó el portal de noticias Europapress.
Hasta el momento, la Policía trabaja con la hipótesis de que varios tiradores abrieron fuego con armas diferentes, pero por el momento no se realizaron detenciones ni se identificaron a víctimas ni sospechosos.
De acuerdo con la jefa de policía de Chattanooga, Celeste Murphy, las fuerzas del orden creen que se trata de un hecho aislado y que la gente ya no corre peligro.
“Tratamos de determinar exactamente qué sucedió y cómo se llegó a esta situación”, manifestó.
El pasado fin de semana, seis adolescentes fueron víctimas de otro tiroteo en la misma zona, en el centro de Chattanooga, durante un enfrentamiento entre dos grandes grupos, según informó el portal de noticias Infobae.
La noche del sábado se registró un episodio similar, pero en Filadelfia, exactamente en el Noreste de Estados Unidos, donde al menos tres personas murieron y 11 resultaron heridas.
“Sabemos que 14 personas recibieron disparos y fueron trasladadas a hospitales. Tres de esos individuos, dos hombres y una mujer, fueron declarados muertos tras llegar a los hospitales con múltiples heridas de bala”, confirmó a la prensa el inspector de policía D.F. Pace.
De acuerdo con el “Gun Violence Archive”, este año ocurrieron en Estados Unidos más de 230 tiroteos masivos en los que cuatro o más personas resultaron heridas o muertas, sin incluir al tirador.
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