En su último intento, Independiente tratará de ganar, o al menos empatar, en el partido que jugará contra Emelec este martes (20:30 hora boliviana) en el estadio “George Capwell” de Guayaquil para apagar las luces de su participación con la frente en alto en la Copa Libertadores.
El campeón boliviano no estuvo a la altura que todos esperaban en su debut en la Copa Libertadores, porque hasta la fecha sólo obtuvo un punto en cinco cotejos, producto del empate a un gol con Emelec en la ida. De ese compromiso a la fecha, no aprendió de sus errores y en la última jornada quiere recompensar a su afición con un triunfo de visita.
Fuera de los cuartos de final en el torneo local y sin chance en la Copa Libertadores -ni siquiera por quedar tercero y dar el salto a la Copa Sudamericana-, el cuadro chuquisaqueño está por cerrar un semestre gris y que ha desatado una crisis institucional y con un fraccionamiento dentro del directorio, presidido por Jenny Montaño.
El plantel albirrojo igualó el fin de semana ante Royal Pari (0-0) con un elenco formado entre titulares y suplentes, colocando la atención sobre el duelo internacional. El entrenador Marcelo Robledo, también debutante en esta faceta de su carrera en Copa Libertadores, tratará de apagar las críticas en Guayaquil.
El cuadro boliviano tendrá la mala fortuna de enfrentarse a un oponente que está en pelea por clasificarse a los octavos de final de Copa Libertadores. Con 15 puntos, Palmeiras ha dejado el segundo boleto en medio de Deportivo Táchira (Venezuela) con siete y Emelec con cinco.
Los “eléctricos” de Guayaquil necesitan de un triunfo y esperar que los venezolanos sean derrotados en su visita al bicampeón de la Copa Libertadores. Pese a que el escenario parece ser favorable a los dirigidos por el entrenador Ismael Rescalvo, han tomado los recaudados para cumplir con su tarea en casa.
