El Ministerio de Salud de Dinamarca informó el lunes reciente sobre el primer caso de la viruela del mono registrado en el país europeo.
Se trata de un hombre que presentó síntomas de la infección tras su viaje a España. Actualmente, permanece aislado, mientras que los médicos iniciaron pruebas en sus contactos cercanos.
«Las autoridades sanitarias no esperan un contagio generalizado de la sociedad en Dinamarca, pero seguimos de cerca la situación para estar lo mejor preparados posible ante una posible evolución de la situación de la infección», declaró el ministro de Salud, Magnus Heunicke.
Actualmente, se desconoce el reservorio natural de la viruela del mono. Sin embargo, los roedores africanos y primates, como los monos, pueden albergar el virus e infectar a las personas.
El virus se registró mayormente en África Central y Occidental y es una infección rara, pero peligrosa, similar al virus de la viruela ahora erradicado. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la viruela símica sigue apareciendo esporádicamente, según reporte de la cadena RT.
Síntomas
La viruela del mono suele tener una sintomatología más leve que la de la viruela.
Según los CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades), la enfermedad comienza con fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, dolor de espalda, escalofríos, inflamación de los ganglios linfáticos (un síntoma que no tiene la viruela) y agotamiento. Hasta tres días después de tener fiebre, se puede desarrollar un sarpullido en la cara y el cuerpo que evoluciona hasta lesiones en la piel como costras.
Según la OMS, en casos iniciales el virus de la viruela del mono, se transmite a través del contacto directo con la sangre, fluidos corporales, lesiones de la piel o las mucosas de animales que han sido contaminados con el virus.
Cuando se trata de la transmisión de humano a humano, los CDC indican que puede ocurrir cuando: Ocurre una mordedura o arañazo, al cocinar inadecuadamente cocción de la carne de animales infectados, ante el contacto directo con fluidos corporales o contacto indirecto con material lesionado y a través de ropa de cama contaminada.
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