Los ítems fantasmas en instituciones públicas en el país presuntamente generan un “botín” de 600 millones de dólares al año, estimó el secretario general de Unidad Nacional (UN), Samuel Doria Medina.
El político se pronunció mediante su cuenta en Twitter, refiriéndose también al escándalo que involucra a varias entidades y que fue detectado primero en la Alcaldía de Santa Cruz, y luego en la Caja Nacional de Salud (CNS).
La investigación busca establecer una presunta red de corrupción que operaba dentro de la Alcaldía cruceña, tras la denuncia de Valeria R., esposa de Antonio Parada quien sostuvo que el exfuncionario de la Alcaldía cruceña, cobraba por 800 ítems presuntamente ilegales.
Según la denuncia, Parada tenía un sueldo de Bs 12.000; sin embargo, con el cobro de salarios por los supuestos ítems fantasmas, adquirió inmuebles valuados en $us 500 mil y envió dinero en montos que van desde $us 82.000 y 1,2 millones a Estados Unidos.
Al respecto Doria Medina considera que se trata de una “inmensa” corrupción.
Instituciones públicas
Alcaldías, universidades, entidades descentralizadas y gobernaciones comenzaron a realizar auditorías para detectar presuntas irregularidades en la contratación de su personal, porque hay personas que están inscritas en planilla, cobran, reciben beneficios sociales, pero no acuden a trabajar, reportó el diario El Deber.
Asimismo, se detectaron contratos “fantasmas” en la CNS, lo cual alarmó a la población y Antonio Parada, exfuncionario de la comuna cruceña, es el principal investigado por los hechos y se encuentra prófugo.
Fungió como director de Recursos Humanos tanto en la Alcaldía de la Capital oriental como en la CNS.
Tras el nuevo proceso, ahora en la CNS, el empresario considera que el diez por ciento de puestos públicos son “fantasmas”.
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