Aunque en Bolivia no se fabrican automóviles, el sector automotriz es uno de los más grandes del país, que genera más de 70 mil empleos indirectos y aporta unos 500 millones de dólares al año en impuestos. Esto se debe a que dentro del país se comercializan un gran número de autos importados, nuevos o usados, gracias a la inversión realizada por diversas empresas importadoras.
Además de proveer autos para comercializar dentro del país, estas empresas están cumpliendo la importante labor de modernizar el parque automotriz de Bolivia, que en su mayoría consiste de autos antiguos, que generan una gran cantidad de contaminación al medio ambiente. Es tanta la contaminación generada por estos vehículos, que La Paz es considerada una de las ciudades con más contaminación en el aire de toda Latinoamérica, superada únicamente por Lima, Perú.
Para combatir este problema, el gobierno nacional estableció un decreto en el año 2016, en el que se exige que todos los autos que se importen al país deben tener tan solo un máximo de 2 años de antigüedad y que cumplan con la Normativa Euro II de emisión de gases contaminantes.
De acuerdo con este decreto, se registró que en el año 2018 se importaron casi 22.500 unidades de autos nuevos, y 4.518 autos usados fabricados entre los dos años anteriores a la importación. Un número similar se registró en el año 2019, dando como resultado una estimación de inversión de 1.000 millones de dólares al año. Sin embargo, debido a la crisis por la pandemia de Covid-19, la cantidad de autos importados y comercializados en el país sufrió una caída importante durante todo el 2020 y el primer trimestre del 2021.
La venta de autos usados y nuevos en el país
Aunque el grueso del mercado se lo llevan los autos importados nuevos, existe una gran demanda de importación de autos usados. La razón es que estos vehículos son más económicos, pero siguen siendo modelos nuevos que cumplen con la norma Euro II, por lo que consumen menos combustible y son menos contaminantes.
Otra ventaja es que empresas como Autopia, no solo anuncian autos de vendedores particulares, sino que importan autos usados en excelentes condiciones para venderlos a través de internet. De esta manera los compradores pueden acceder a un vehículo prácticamente nuevo, con poco kilometraje, sin tener que pasar por el proceso de comprar un auto nuevo.
En general, quienes compran automóviles nuevos deben esperar que el auto sea enviado desde el exterior y se cumplan los trámites de repatriación. Este proceso, en algunos casos, puede tardar hasta más de un año; de esta manera, comprar un vehículo de segunda mano a través de una página web como la antes mencionada, es una alternativa eficiente y más rápida.
Actualmente en el país sigue existiendo una problemática fuerte con respecto al parque automotriz antiguo y la contaminación, sin mencionar la venta de autos ilegales, pero se estima que la problemática se reduzca en los próximos años gracias a la incorporación de unidades más nuevas.
