Fundación de la Villa San Felipe de Austria
Hace 415 años naciste fruto de tu corazón de argento, en cuyas raíces la sangre uru emanaba del subsuelo, para convertir a esta tierra bendita en cuna de hombres valerosos, centro de episodios históricos y vertiente de cultura que trasunta el tiempo. El poder de tus brazos levantó un país, en tus páginas se escribió la idea de la libertad que hoy gozan todos los bolivianos.
Virgen del Socavón, Madre nuestra
“K’achamosa”, “Morenita”, “Mamita”, son solo algunos denominativos que salen desde el corazón de los orureños para referirse a la Virgen del Socavón, Patrona del Folklore Nacional, cuya imagen yace en el Santuario del mismo nombre, donde llegan sus fieles devotos vestidos de diablos, morenos, y otras danzas más que hacen a la “Obra Maestra” en época de Carnaval. Madre milagrosa que guías y proteges a tu pueblo, que te admira y venera en la dimensión que solo el orureño entiende.
Carnaval de Oruro un tesoro mundial
Naciste de las entrañas de tu tierra en el siglo XVIII, haciendo milagros te conocieron para dar forma a la fe y devoción mediante la danza. Cada año, tus hijos orgullosos bailan al compás de sendas melodías de los instrumentos de metal y cual encarnados en personajes diversos, muestras la grandiosidad cultural de Bolivia. Es el Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, tesoro envidiado por connacionales y foráneos. Eres la simbiosis perfecta de lo religioso y pagano, fruto del encuentro del europeo con el nativo, manifestación mágica, donde las leyendas y la mitología se hacen realidad para conquistar a la humanidad.
La histórica Plaza 10 de febrero
Escenario absolutamente histórico, de rebeliones sangrientas, glorieta de revoluciones, sitio con estilo francés, elementos que te marcan el corazón y momentos que se quedan en recuerdo. Espacio de eternidad, inspiración y suspiros. Reflejo de la realidad, transformación para las futuras generaciones y ocasiones que quedarán escritas para siempre.
Faro de Conchupata fiel testigo de historias orureñas
En la Alta Tierra de los Urus, una luz infinita ilumina el patriotismo de los orureños, destello emanado desde el Faro de Conchupata, fiel testigo de historias patrióticas y aquellas que nacen del corazón. “El Faro”, se erige como un custodio ante quien amenaza a los valerosos urus. Además cobija cerca del cielo a nuestro imponente y protector pabellón Tricolor.
Ferrocarril de ensueño
Desde lejos escuchamos el fuerte silbido del chu… chu… anunciando la llegada de nuestro ferrocarril a la Alta Tierra de los Urus. Los orureños sentimos el retumbar del piso, el vibrar de las vías y el lento traqueteo de los vagones, sonidos que nos transportan rápidamente al primer día pisando aquel tren de ensueño, ferrocarril de experiencias inolvidables que quedarán plasmadas en el corazón.
LA PATRIA es el sentimiento orureño
LA PATRIA es la historia viva de todos los orureños, su voz, sus costumbres, alegrías y derrotas. LA PATRIA es parte íntima de cada uno de los habitantes porque refleja fielmente el sentimiento puro y la vida cotidiana de los ciudadanos, informando de manera imparcial, responsable y veraz no solo como prensa, ahora llegando también de manera digital. Es por eso que LA PATRIA es considerada, el Subdecano de la Prensa Nacional.
San José, más que solo un equipo de fútbol
Equipos de fútbol hay muchos, pero es San José, el que a lo largo de su historia y gracias a heroicas jornadas futboleras, ha conseguido incrustarse en la piel y el corazón de los orureños; incluso quienes son hinchas de otros clubes, reconocen la grandeza de esta institución y su hinchada. Más que un equipo, es un sentimiento y pasión. No por nada, está el mítico eslogan “San José es Oruro y Oruro es San José”.
Un placer musical
Las bandas de música son capaces de cambiarte el estado de ánimo en un “abrir y cerrar de ojos”, con sus interpretaciones llenas de emoción y sentimiento, son capaz de transportarte al mejor Carnaval que hayas pasado en tu vida. Las bandas de música, además, logran acrecentar la majestuosidad del Carnaval de Oruro, tan arraigada y propia de todos los orureños.
Oruro en el pentagrama musical
En ti nacieron los mejores valores musicales, engrandecieron la riqueza cultural y dejaron un rico legado de melodías y composiciones, patrimonio de toda la nación. Grandes maestros, Gilberto Rojas, Raúl Show Moreno, Jach’a Flores, César Espada, entre muchos más, hicieron de su Oruro, en un terruño invaluable pintando con talento el pentagrama del acervo nacional y de la Capital del Folklore de Bolivia.
El crujiente charquekan
Charquekan el plato más sencillo pero exquisito de la tierra de los Urus, con probarlo, deleita paladares de propios y extraños. Te diriges al altiplano boliviano, la crujiente carne de llama te transporta a un universo diferente, con el sabor de la papa y el mote, tu mente viaja hasta el lugar de las riquezas naturales de Oruro, y la llajua hace que tu paladar vaya a otra dimensión.
Api con pastel
Con una textura granulada, te quema si te “pilla desprevenido”, pero cuando toca tu paladar, llega a ser un aperitivo exquisito. El api con pastel es una “sabrosura” orureña, tradicional para quien llega a esta tierra. Bebida típica del altiplano, que se hace en base al maíz molido. Acompañado de un pastel, hecho de harina y queso, derrite cualquier corazón extranjero.
El sabor orureño está con los chorizos de La Ranchería
Un deleite en el paladar, explosión de sabor y tradición orureña, es lo que producen los exquisitos chorizos de La Ranchería. Tan solo una mordida de este manjar, hacen sentir el verdadero cariño de esta noble tierra de Pagador, generando en quien los prueba una satisfacción que instan al pronto retorno. Para propios y extraños este atractivo de la gastronomía de la región, es algo infaltable para degustar.
El único frío que conquista el corazón
Único en aromas, sabores y colores, enteros o mezclados, parte del proceso es triturarlos, pero en las manos correctas, dulcemente conquistan cualquier corazón amargado.
Es el helado de canela, cual si fuera una solución de antaño a cualquier situación de aquel que lo prueba, propios y extraños no se van de Oruro, sin probar el refrescante manjar de satisfacción.
El sabor del exquisito rostro asado
El rostro asado, más conocido entre los comensales orureños como la comida del diablo, es el orgullo de la tradicional cocina orureña y una fiesta para el paladar. Comerlo es un ritual, quitar el cráneo, devorar el seso y descornar hasta el último hueso, ya sea parado o sentado en las calles de la Capital del Folklore de Bolivia antes de que la madrugada lo impida, es como un banquete de reyes.
/LA PATRIA/
