Cervecería Boliviana Nacional se consolida como la primera empresa del país, uniendo la historia con la innovación que busca dar respuesta a las necesidades de los consumidores y la sociedad.
Octubre 2021.- Cervecería Boliviana Nacional cumple 135 años de historia, tiempo en el que se ha consolidado como una empresa fuerte, resiliente, pero, sobre todo, solidaria. A lo largo de su vida institucional ha estado al lado del pueblo boliviano, para atender sus necesidades y para proyectar el futuro de la industria.
“La capacidad de resiliencia de CBN y nuestro espíritu innovador, acelerado por la propia pandemia, nos ha impulsado a la transformación digital, para construir un futuro sostenible a través de productos que conectan, inspiran y enorgullecen a Bolivia”, declaró el gerente General de la industria, Tiago Menezes.
Historia
CBN nació el 20 de octubre de 1886, cuando tres empresarios de origen alemán decidieron unir las cervecerías: Boliviana y Americana para consolidar una industria que desde entonces no ha parado de crecer y de aportar al desarrollo de Bolivia.
“Desde sus inicios, Cervecería Boliviana Nacional demostró que la fortaleza nace de la unidad, que cuando unimos voluntades, nacen grandes cosas”, expresó el ejecutivo.
Al comenzar el siglo XX, la fábrica se instaló cerca a la estación del tren, la puerta de entrada a la ciudad. En poco tiempo, su calidad era conocida en todo el país y su denominación de origen le dio el nombre a la que ahora es la marca insignia de la compañía: “Paceña”.
Con el transcurso del tiempo, CBN se ha convertido en la industria más importante del país y la que más aporta a su desarrollo.
Solidaridad en nuestro ADN
Pero más allá del aporte formal de la empresa al Estado, en su programa de Responsabilidad Social, la compañía trabaja con un enfoque de solidaridad, innovación y sustentabilidad. El impacto de sus acciones en este campo se basa en una escucha activa de las necesidades de la comunidad para darles soluciones pertinentes y adecuadas.
Desde su nacimiento, CBN ha estado apoyando solidariamente a la comunidad boliviana cuando más lo ha necesitado. Una de las muestras del apoyo de la empresa se produjo durante la Guerra del Chaco, cuando construyó y equipó un hospital en la ciudad tarijeña de Villamontes para atender a los heridos de la conflagración bélica.
La pandemia mundial del Coronavirus fue otra de las crisis en los que la solidaridad de la Cervecería Boliviana Nacional ha sido requerida. Desde el inicio de la pandemia ha realizado aportes por un monto que supera los 9,7 millones de bolivianos. La ayuda específica para combatir a la COVID-19 se compone hasta el momento de 355.822 ítems de material de bioseguridad, además de un apoyo importante para impulsar la vacunación contra el virus.
“En un contexto marcado por la crisis sanitaria, nuestras plantas de producción tuvieron que parar, pero pusimos toda nuestra capacidad logística para apoyar a quienes se encuentran en la primera línea de defensa contra el COVID-19. Nuestros camiones dejaron de transportar cerveza para llevar nuestra solidaridad al pueblo boliviano”, sostuvo Menezes.
El aporte al país
La Cervecería Boliviana Nacional ha acompañado, desde su nacimiento, al desarrollo del país. Medio siglo después de su fundación, ya era el mayor contribuyente al Tesoro General de la Nación, al punto que, en el año 1937, Cervecería Boliviana Nacional pagó al Estado 20 millones de bolivianos, mientras que las tres grandes empresas mineras de la época: Patiño, Hochschild y Aramayo, combinadas llegaron a pagar 19.754.000.
Hoy, CBN sigue siendo la empresa privada que más contribuye con impuestos a las arcas del Estado, es una industria que genera 1.700 fuentes de empleo directas y 6.200 trabajos indirectos. Es la empresa número uno en el mercado en toda Bolivia, además de ser reconocida como la empresa líder en Responsabilidad Social Empresarial. “La Cervecería es historia, tradición y herencia; pero también es futuro e innovación que pone a nuestros clientes en el centro de todo nuestro trabajo. Nos impulsa además el afán de contribuir de manera efectiva a la reactivación económica de Bolivia”, concluyó el ejecutivo.