Desde el Grupo Especial de Búsqueda y Rescate «Sar-Fab-Beni», exigieron a las autoridades correspondientes que se inicie un proceso por el biocidio que cometieron algunos pobladores de la localidad Magdalena del departamento beniano, tras matar a un caimán negro, especie que se encuentra en peligro de extinción.
Las personas que capturaron al reptil, tuvieron que utilizar un tractor para levantarlo. En redes sociales circuló un video, el cual asombró con la captura de un caimán negro en el río Itonama cercano a dicha localidad.
El enorme animal medía cuatro metros de longitud y dejó asombrados a los pobladores, quienes no dudaron en tomarse una fotografía con el cadáver. Según animalistas, esta especie se encuentra en la lista de animales en peligro de extinción.
Según el portal de Extinción Animal, la clasificación de la denominada “Lista Roja” de especies en peligro de extinción, afirman que existen especies en peligro, en peligro crítico o vulnerable. En Bolivia se encuentran amenazadas 163 especies animales, divididas en categorías.
Cuatro Invertebrados, un artrópodo (Boeckella calcaris) y tres moluscos (Ramphopoma magnum, Heleobia ortoni y Heleobia andecola). Asimismo, 159 vertebrados, 55 aves, 24 mamíferos, 15 reptiles, 57 anfibios y ocho peces.
La Ley Nº 1333 emitida el 27 de abril de 1992, tiene por objeto la protección y conservación del medio ambiente y los recursos naturales, regulando las acciones del hombre con relación a la naturaleza y promoviendo el desarrollo sostenible con la finalidad de mejorar la calidad vida de la población.
Sobre el Caimán Negro
Este reptil puede llegar a medir hasta seis metros de longitud, aunque el tamaño usual es de dos, cuatro y tres metros, actualmente son raros aquellos que en la naturaleza sobrepasan los cuatro metros. El nombre lo obtienen por el color de la piel que tienen los caimanes adultos.
El nido de esta especie es una aglomeración de vegetación seca y tierra, el proceso de elaboración de sus moradas toma vario días, una vez realizado su hogar, con las patas traseras hacen un hueco sobre el montículo y es ahí donde deposita sus huevos. Terminada la puesta, cubre los huevos y se traslada al agua. Este animal puede poner de 21 a 75 huevos.
El cascarón de los huevos es duro. Estos pueden medir de 86 a 97 milímetros, aunque por lo habitual son de 50 a 56 mm y pesan de 90 a 155 gramos.
Los caimanes recién nacidos pesan al menos 90 gramos y miden de 20 a 30 centímetros (cm). A los pocos días de nacidos se les ve entre la vegetación acuática en la laguna u otro depósito de agua próximo al cual la madre anidó.
En cuanto a su alimentación, se basa de peces, mamíferos medianos a grandes, además de venados, carpinchos, cerdos y perros.
El hábitat de estos reptiles es en todo tipo de agua dulce. Demuestra cierta preferencia por los lagos, ríos de poca corriente, campos inundados, etc.
Esta especie puede hallarse en el Norte de Sudamérica. Su distribución alcanza la cuenca del Amazonas, desde la desembocadura hasta Ecuador y Bolivia.
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