Luego de cuatro años, la Alcaldía de Achacachi del departamento de La Paz reabrió sus oficinas para realizar un monitoreo, sin embargo, las autoridades quedaron asombradas no solo por la suciedad acumulada, sino porque las palomas la convirtieron en su casa, dejando además sus heces apiladas en todo el mobiliario.
El 2017 la Alcaldía de Achacachi fue cerrada debido a un conflicto de algunos vecinos que exigían la renuncia del alcalde Édgar Ramos, por presuntamente cometer hechos de corrupción.
Luego de la elección de nuevas autoridades del municipio, se procedió a reabrir las puertas de la Alcaldía y realizar una revisión de ella en compañía de algunos medios de comunicación.
Asimismo, se observó bastante polvo en las oficinas, sillas, paredes y documentos que ya estaban deteriorados.
Lo más impactante es que el Concejo Municipal estaba repleta de palomas y heces del animal esparcidas por toda la alfombra. Así también había huevos y cadáveres de palomas.
En la sala de sesiones, las sillas de los invitados tenían pilas de polvo y heces, además, las cortinas estaban destrozadas y las ventanas sucias.
El presidente del Concejo, Zoilo Huarachi quebró en llanto al ver el estado de la sala de sesiones e indicó que se sentía muy triste.
Asimismo, el dirigente Edwin Larico acusó a las exautoridades del municipio y pidió que se refaccione o si es necesario que se reconstruya las oficinas.
//