Periodistas y medios independientes sufren agresiones, ataques verbales y hostigamiento por reeditar y documentar los incidentes sucedidos entre octubre y noviembre de 2019, mediante seguidores afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) y medios estatales que utiliza el Gobierno.
Esa situación se conoció en el informe de medio año, fechada el 15 de abril y presentado por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) que afirma que la labor de los periodistas ha sido descalificada a través de medios estatales y medios afines al Gobierno.
Asimismo, los trabajadores de la prensa son atacados por seguidores del MAS a través de cuentas anónimas en redes sociales y desde las cuales manifiestan acusaciones sin fundamento, señala la SIP.
“Rasgos de preocupante violencia en agresiones a periodistas y actitud pasiva de autoridades encargadas de preservar la justicia y el respeto a la libertad de prensa marcan este periodo”, indica parte del informe.
Según el informe, el Gobierno estuvo enfocado en mostrar que el país sufrió un golpe de Estado, durante los días de rebeldía popular que rechazó el fraude en las Elecciones Generales de octubre de 2019 que posteriormente terminó con la renuncia de Evo Morales.
Por otro lado, la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) solicitó respetar el derecho a la información con medidas de bioseguridad por la salud de los periodistas, personal de centros hospitalarios y de la seguridad pública.
HECHOS DE VIOLENCIA HACIA PERIODISTAS
Un conflicto entre productores de la hoja de coca de la zona de los Yungas del departamento de La Paz, derivó en hechos de violencia y afectó a reporteros de radio y televisión.
El 7 de enero de 2021, equipos de prensa de canales de televisión que cubrían los enfrentamientos entre dos bandos, fueron atacados con explosiones de dinamita, aunque no se reportaron daños personales.
Otro reportero, Franklin Guzmán, de radioemisoras de los Yungas, fue detenido el 30 de marzo por conductores de transporte de pasajeros, atado a un palo y despojado de su teléfono móvil.
El 5 de abril el periodista Cristian David Canacana denunció que un policía antimotines le disparó al rostro un proyectil de gas lacrimógeno que le provocó una herida en el labio superior. El hecho se registró en medio de protestas de los productores de hojas de coca. El gobierno no emitió ningún pronunciamiento frente a estas denuncias.
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