Afiliados a la Asociación de Productores de Hoja de Coca (Adepcoca) de los Yungas de La Paz realizaron una marcha el miércoles 14 de abril hasta las oficinas de la Delegación de la Unión Europea (UE), en la zona Sur de La Paz. Denunciaron que los fondos sociales que viene de esta entidad, todo se fue al Chapare.
La movilización se realizó como parte de las protestas que desde hace un mes efectua este sector para exigir que el Gobierno Luis Arce deje de interferir en sus labores para favorecer a la dirigencia paralela que está liderada por dirigente oficialista Elena Flores.
El máximo dirigente de Adepcoca, Armin Lluta comunicó a los cocaleros que Los Yungas no ha recibido hasta el día de hoy ni un solo centavo, todo se fue al Chapare y también los fondos sociales que vienen de la Unión Europea.
“Hace un mes enviamos una queja ante esta delegación y no recibimos respuesta, esperaremos hasta el lunes 19 de abril para que se conforme una comisión de diálogo, si eso no sucede, retornamos con mayor contundencia”, afirmó.
Lluta se refirió a la aprehensión del ahora exministro Characayo y dijo que esta es una forma de hacer justicia por cómo se portó esta autoridad con su sector, al aprobar la resolución ministerial que luego trajo el conflicto.
“La justicia divina tarda, pero llega, los yungueños hemos sido totalmente atropellados por culpa de esta autoridad gubernamental, que ha emitido una resolución contraria a la ley y ha dejado muchos heridos y muchos detenidos”, señaló el dirigente.
Señaló también que siempre hubo sospechas de que había algún tipo de negociación para que se apruebe la resolución para el traslado del mercado de la hoja de coca.
Ya es un mes, que el conflicto cocalero por la aprobación de esa disposición gubernamental continua con bloqueos en la carretera a Los Yungas, marchas y bloqueos en la ciudad de La Paz.
En este tiempo hubo al menos unos 14 heridos, entre ellos dos hombres que perdieron las manos por la explosión de cachorros de dinamita.
La Defensoría del Pueblo se comprometió a intermediar en el conflicto, pero aún no se logró instalar una mesa de diálogo.
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