El ministro de Economía y Finanzas Públicas, José Gabriel Espinoza, anunció este martes 25 de noviembre de 2025 la abrogación de cuatro impuestos clave que habían sido creados y promulgados durante la administración del Movimiento Al Socialismo (MAS). Esta decisión tiene como objetivo aliviar la presión sobre el sector productivo y financiero, buscando reactivar la inversión extranjera directa y los negocios.
“Hemos decidido abrogar cuatro impuestos: el Impuesto a las Transferencias Financieras (ITF), el Impuesto a las Grandes Fortunas (IGF), el impuesto al juego y el impuesto a las promociones empresariales”, confirmó el ministro Espinoza en conferencia de prensa.
Aunque los cuatro gravámenes en conjunto representan menos del 1% de la recaudación fiscal total, según el ministro, su impacto negativo en la economía y la generación de contradicciones en el ámbito de negocios fue el principal argumento para su eliminación.
Impuesto a las grandes fortunas
La medida más significativa es la abrogación del Impuesto a las Grandes Fortunas (IGF), promulgado en diciembre de 2020 (Ley Nº 1357) y dirigido a personas naturales con un patrimonio neto superior a 30 millones de bolivianos (aproximadamente 4,3 millones de dólares estadounidenses). A pesar de que el Ministerio de Economía anterior lo promocionó como una herramienta de equidad y redistribución de la riqueza, Espinoza fue categórico al señalar las consecuencias adversas.
“El impuesto a las grandes fortunas ha representado una salida de capitales de Bolivia, un desincentivo muy fuerte a las inversiones extranjeras en el país”, dijo el ministro Espinoza, alineándose con las quejas del empresariado sobre una “asfixia impositiva”.


Impacto del IGF
El IGF, que alcanzó a recaudar más de 446 millones de bolivianos entre 2021 y 2022, era visto por el sector privado como un factor de inestabilidad y una señal adversa para los grandes patrimonios y el capital internacional.
Eliminación del ITF
Otro impuesto relevante que desaparece es el Impuesto a las Transacciones Financieras (ITF), un gravamen a las operaciones realizadas en moneda extranjera (principalmente dólares). Creado originalmente en 2006 de forma transitoria y con una alícuota inicial de 0,15%, el ITF fue objeto de sucesivas ampliaciones y modificaciones en su alícuota, llegando a estar vigente hasta 0,30% en ciertos períodos.
Este impuesto, que aplicaba a retiros, depósitos y transferencias en dólares, generaba fricciones con el sector exportador, que históricamente denunció que disminuía la competitividad de sus operaciones en el comercio internacional. Su eliminación busca facilitar el flujo de capitales en moneda extranjera, en un contexto de escasez de dólares que ha marcado la economía boliviana reciente.














