Luis Edgar Cabezas Condori, de 39 años, ha sido aprehendido en Cochabamba por el presunto feminicidio de su pareja, Benita Silvia Quispe, desaparecida desde hace meses.
El caso ha destapado un escándalo: el sujeto estaba en libertad a pesar de contar con una sentencia condenatoria de 30 años por el asesinato de la hermana de Benita, Ana María Quispe, y la desaparición de su sobrino.
Según información publicada por Unitel, la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) investiga por qué Cabezas Condori estaba libre.
El director de la Felcv, coronel Jhonny Coca, confirmó que el sujeto tenía una sentencia “no ejecutoriada” por el delito de asesinato desde 2014. Las autoridades están recabando información para determinar la situación legal de este mandamiento.
Se conoció que el hombre salió de la cárcel porque su propia pareja, Benita pagó una fianza tras vender bienes de sus padres, ya que la sentencia no había sido ejecutoriada.
Cabezas Condori, en 2014, fue condenado por el asesinato de Ana María Quispe, cuyo cuerpo fue hallado sin vida en un barranco.
También fue condenado por la desaparición de su sobrino de 3 años, hijo de Ana María, cuyo cuerpo nunca fue encontrado.
El sujeto fue recientemente aprehendido por la desaparición de Silvia Quispe, quien no ha sido hallada desde hace meses.
Benita desapareció el 17 de junio sin dejar rastro. Según los familiares de la víctima, Cabezas ofreció distintas versiones sobre el paradero de su pareja principalmente presuntos viajes de negocios y se negó a presentar una denuncia a la Policía, a pesar de la insistencia de los allegados.
El caso se inició como trata y tráfico de personas, pero tras la aparición de nuevas pruebas e indicios, la figura legal fue cambiada a feminicidio, según la abogada de la familia, Aidé Carachi, lo que derivó en la aprehensión del sujeto.
El hombre de 39 años permanece en celdas policiales mientras las autoridades intentan determinar su situación jurídica, y la búsqueda de Benita Silvia Quispe continúa.













