El gobernante venezolano, Nicolás Maduro, solicitó al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) revocar la nacionalidad al líder opositor Leopoldo López, exiliado en España, acusándolo de un “grotesco, criminal e ilegal llamado a la invasión militar” contra el país.
La vicepresidente ejecutiva, Delcy Rodríguez, informó este sábado que el jefe de Estado presentó el recurso ante el TSJ el viernes. La solicitud también se fundamenta en la supuesta “promoción permanente del bloqueo económico” y el “llamado a asesinar masivamente a los venezolanos” por parte de López, en “complicidad con Gobiernos y enemigos extranjeros”.
Como medida inmediata, Rodríguez detalló que la Cancillería y el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) “procederán de inmediato… a la anulación del pasaporte” del opositor.
La acción del Gobierno se produce luego de que López, en una entrevista con la agencia EFE en Madrid, respaldara el despliegue militar de Estados Unidos en el mar Caribe y afirmara que, a su juicio, se debería “avanzar a objetivos dentro del territorio nacional” para lograr un cambio político que acabe con el mandato de Maduro. Estas declaraciones fueron posteriormente rechazadas por las principales autoridades de la Fuerza Armada venezolana.
La petición del mandatario choca directamente con el Artículo 35 de la Constitución venezolana, que establece claramente que los ciudadanos “por nacimiento no podrán ser privados o privadas de su nacionalidad”.
Leopoldo López es ciudadano venezolano por nacimiento. El mismo artículo constitucional indica que la nacionalidad otorgada “por naturalización solo podrá ser revocada mediante sentencia judicial, de acuerdo con la ley”, una condición que no aplica al opositor.
La solicitud de Maduro ante el TSJ abre un debate legal sin precedentes sobre la soberanía y los derechos constitucionales en Venezuela, en medio de las tensiones con Estados Unidos y el despliegue naval que Caracas denuncia como una “amenaza” para propiciar un “cambio de régimen”.













