En el Día Mundial contra la Poliomielitis, la comunidad internacional celebra un importante logro en salud pública: la reducción de los casos de polio en más del 99% desde 1988. Sin embargo, este 24 de octubre también sirve como un llamado urgente a la acción, especialmente para países como Bolivia, que aunque están libres del virus, deben reforzar sus defensas ante el riesgo global.
Esta jornada fue establecida para honrar a los creadores de la primera vacuna contra la polio. Es fundamental recordar que, aunque la enfermedad es altamente contagiosa y potencialmente mortal, no tiene cura conocida, pero es completamente evitable. A pesar de los avances, el virus sigue siendo una amenaza a nivel global.
Progreso en la lucha
El avance en la lucha contra la poliomielitis ha sido monumental. En 1988, la enfermedad paralizaba a aproximadamente 350,000 niños cada año. Hoy en día, el poliovirus salvaje solo se encuentra endémico en 2 países: Afganistán y Pakistán, donde la cifra de casos se mantuvo activa, sumando 99 en 2024.
La persistencia del virus en regiones de conflicto y con sistemas de salud frágiles, como se ha documentado recientemente en la Franja de Gaza, demuestra que el riesgo de importación sigue presente.
El papel de las organizaciones
Organizaciones como Unicef, que desempeñan un papel central en la Iniciativa Mundial para la Erradicación de la Polio (GPEI), han distribuido cerca de 900 millones de dosis de vacunas contra la polio en 2024. Esto resalta la importancia de la movilización social para asegurar que “ningún niño quede atrás”. Gracias a estos esfuerzos, más de 20 millones de personas están caminando hoy y se han evitado 1.5 millones de muertes.
El caso de Bolivia
Para Bolivia, el Día Mundial contra la Polio es un recordatorio de la fragilidad del éxito. El país fue certificado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) como libre de poliomielitis, con el último caso notificado en 1986. Sin embargo, el principal desafío ahora es mantener esta certificación.
En el contexto de la Semana de Vacunación de las Américas de este año, el Ministerio de Salud y Deportes lanzó una campaña intensiva con el objetivo de inmunizar a más de 1.1 millones de niños y niñas de 5 a 8 años, priorizando a aquellos que no completaron su esquema de vacunación entre 2016 y 2019.
La importancia de la vacunación
“La polio no respeta fronteras”, advirtió un vocero de salud durante el lanzamiento de la campaña en abril de 2024. Expertos sanitarios han expresado su preocupación por la disminución de las coberturas de vacunación tras la pandemia de Covid-19, un fenómeno que convierte a la población no inmunizada en un blanco fácil para cualquier reintroducción del virus.
El país ha implementado estrategias como el contraste de los registros de estudiantes con el Registro Nominal de Vacunación Electrónica (RNVe) para identificar y alcanzar a los menores rezagados.
Un futuro sin poliomielitis
La conmemoración de hoy reafirma que, aunque el mundo está cerca de la erradicación total, la batalla solo se ganará cuando la cobertura de la vacuna sea completa en cada rincón del planeta. Solo así se asegurará que la historia de la poliomielitis quede definitivamente en el pasado.













