La atención de emergencias médicas en las zonas rurales de Bolivia se encuentra en una situación crítica. La escasez de gasolina y diésel ha dejado a muchas ambulancias sin poder operar, lo que impide el traslado de pacientes en estado grave hacia centros hospitalarios de tercer nivel. Esta denuncia fue realizada el jueves 9 de octubre de 2025 por el Sindicato de Ramas Médicas (Sirmes) de La Paz.
Problemas en el servicio de salud
Fernando Romero, dirigente de Sirmes, explicó que los servicios de salud en las áreas rurales están severamente limitados debido a la falta de carburantes. Médicos de diversas provincias han informado sobre las dificultades para movilizar ambulancias, lo que resulta en demoras significativas en la atención médica. En algunos casos, esto ha llevado incluso a fallecimientos durante el traslado.
“No hay un plan de emergencia, la gasolina y el diésel no hay en el área rural. Los pacientes graves, al no haber un plan, no pueden llegar y están en el camino falleciendo, complicando enfermedades y pasando situaciones de dolor extremo”, advirtió Romero en declaraciones recogidas por Unitel.
Impacto en la población vulnerable
El dirigente también destacó que esta situación afecta principalmente a la población más vulnerable. “La población más pobre, la que está en el área rural, está siendo la más golpeada”, enfatizó.
Se mencionaron casos específicos, como el de mujeres con embarazos de alto riesgo y niños en Tipuani que padecen infecciones respiratorias graves. Estos pacientes no pueden acceder a servicios especializados en centros urbanos, lo que ilustra las consecuencias directas de esta crisis.
Recursos insuficientes en centros médicos
Romero también alertó que los centros médicos en las provincias no cuentan con los recursos necesarios para enfrentar esta emergencia. Esto agrava la situación en un contexto donde una reacción rápida puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Contexto de escasez de carburantes
La escasez de carburantes es parte de una problemática nacional. Según Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), el suministro no puede garantizarse mientras el Ministerio de Economía y Finanzas no facilite los dólares necesarios para la importación de combustibles. Sin embargo, la estatal petrolera anunció que, a partir del viernes 10 de octubre de 2025, se espera un incremento gradual en los volúmenes de gasolina y diésel para normalizar la distribución en las estaciones de servicio.
Urgencia de medidas gubernamentales
“La carencia de la gasolina está poniendo en riesgo la vida de la población”, reiteró Romero. Al mismo tiempo, hizo un llamado a las autoridades para que implementen medidas urgentes que eviten más pérdidas humanas.