p>El 1 de octubre se celebra el Día Internacional del Café, una fecha establecida por la Organización Internacional del Café en 2015. Este día tiene como objetivo reconocer la importancia económica y cultural de esta bebida que involucra a más de 25 millones de familias productoras en América Latina, África y Asia. La elección de esta fecha coincide con la inauguración de la Exposición Mundial del Café en Milán, donde se resalta la necesidad de un comercio más justo para los agricultores.
Importancia del café en el mundo
El café es el segundo producto más comercializado en el mundo, solo superado por el petróleo. Brasil, Vietnam y Colombia se encuentran entre los principales exportadores de café, aunque también hay países como Etiopía, Honduras y Perú que destacan en este ámbito. La producción de café involucra a pequeños agricultores que enfrentan diversos desafíos, como el cambio climático y la volatilidad de precios.
Desigualdad en el comercio
El comercio del café genera miles de millones de dólares anualmente, pero una gran parte de esa riqueza no llega a los campesinos. En cada celebración del Día Internacional del Café, se enfatiza la necesidad de promover un comercio más justo que garantice mejores condiciones para quienes trabajan la tierra. Además de su valor económico, el café tiene una dimensión cultural que lo convierte en una parte esencial de la identidad de muchos pueblos.
Cultura del café en diferentes ciudades
Cafeterías en ciudades como Viena, Estambul, Ciudad de México y Lima son espacios donde se llevan a cabo encuentros políticos, artísticos y literarios. Desde el ritual etíope de tostar los granos hasta la sofisticación de los baristas contemporáneos, cada taza de café encierra una historia única. El Día Internacional del Café busca resaltar este papel cultural, mostrando cómo el grano ha trascendido su función como mercancía para convertirse en un símbolo de conexión social.

Retos de la industria del café
La industria del café enfrenta un panorama complicado debido al cambio climático y la presión por adoptar prácticas sostenibles que minimicen el impacto ambiental del sector. El Día Internacional del Café también actúa como una plataforma para debatir sobre innovación agrícola, certificaciones de calidad y la promoción de variedades orgánicas. Iniciativas en diferentes países buscan fortalecer la resiliencia de las comunidades rurales, impulsar el consumo interno y diversificar la oferta.
Historia de la celebración
El objetivo de esta celebración es asegurar que la bebida que une a millones de personas cada día continúe siendo una fuente de sustento y un motor cultural en las próximas generaciones. Antes de que se formalizara esta celebración global, cada país rendía homenaje al café en días distintos. Japón lo celebraba desde 1983 y Estados Unidos lo hacía en septiembre. La unificación de la fecha buscó dar una voz común a los productores que históricamente han enfrentado problemas relacionados con precios inestables y falta de visibilidad.