Las autoridades bolivianas entregaron a la Policía de Argentina al ciudadano peruano de 41 años investigado por presuntamente participar en el asesinato de Morena Verdi (20), Brenda Loreley Del Castillo (20) y Lara Morena Gutiérrez (15), ocurrido en Florencio Varela, provincia de Buenos Aires.
El hombre, identificado como Lázaro Víctor Sotacuro, fue detenido la noche del viernes en un alojamiento de Villazón, en la frontera con Argentina, durante un operativo de la Policía y de Interpol Bolivia. Posteriormente fue trasladado a dependencias de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (Felcc) de esa localidad, donde se procedió con su arresto.
El director nacional de Interpol Bolivia, Juan Carlos Bazoalto, confirmó este domingo 28 de septiembre que Sotacuro ingresó a Bolivia por un paso irregular, sin registrarse en los controles migratorios.

Señaló además que la madrugada del sábado se concretó su expulsión definitiva, bajo un procedimiento de salida forzosa migratoria. La entrega se realizó en el puente internacional de Villazón, en presencia de autoridades argentinas, con actas respaldadas por la Ley de Migración.
El fiscal superior de Delitos Contra la Vida, Sergio Fajardo, indicó que el proceso de entrega se coordinó de manera inmediata con autoridades policiales y migratorias para evitar dilaciones.
Tras su expulsión, Sotacuro fue trasladado a la provincia de Jujuy y desde allí este domingo se inició su traslado hacia Buenos Aires en un vuelo que incluyó una escala en Córdoba para reabastecimiento. El operativo contó con un fuerte resguardo de seguridad, según medios argentinos.

La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, aseguró que Sotacuro es dueño de la camioneta blanca en la que las tres víctimas fueron vistas con vida por última vez antes de ser llevadas a la vivienda donde finalmente fueron asesinadas. Por su parte, la secretaria de Seguridad de la Nación, Alejandra Monteoliva, afirmó que el hombre presuntamente también facilitó otro vehículo que actuó como apoyo durante el crimen.
Las tres jóvenes desaparecieron el 19 de septiembre y sus cuerpos fueron hallados enterrados en una vivienda de Florencio Varela el miércoles 24. De acuerdo con las investigaciones, las víctimas fueron torturadas y el hecho fue transmitido en vivo a través de la red social Instagram en un grupo cerrado.
Otros cuatro detenidos vinculados al caso se encuentran bajo custodia judicial en el penal de Melchor Romero, luego de negarse a declarar ante la fiscalía argentina. Según el ministro provincial de Seguridad, Javier Alonso, el triple feminicidio estaría vinculado a una organización narcotraficante que opera desde un barrio popular de la capital argentina.