El 23 de septiembre se celebra el Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas. Esta fecha fue establecida en 1999 por la Coalición Contra el Tráfico de Personas en Bangladesh. Su objetivo es crear conciencia sobre la trata de personas, un delito que afecta principalmente a mujeres, niñas y adolescentes en todo el mundo.
Además, esta conmemoración recuerda la promulgación de la Ley Palacios en Argentina en 1913, que fue la primera legislación contra la prostitución infantil.
La trata de personas
La trata de personas con fines de explotación sexual es una forma de violencia que atenta contra la libertad y dignidad de las víctimas. Se estima que en el mundo hay 1.8 millones de personas que son víctimas de delitos de trata para explotación sexual. Este delito es comparable al tráfico de drogas y armas.
Compromiso colectivo
La conmemoración del 23 de septiembre invita a los Estados, organizaciones y a la sociedad a reforzar políticas de prevención, protección y acceso a la justicia. Al mismo tiempo, busca generar conciencia ciudadana para reconocer señales y denunciar situaciones de explotación. Recordar esta fecha es un llamado a la acción, ya que la lucha contra la trata requiere un compromiso colectivo.
Conferencias mundiales
Desde su establecimiento, el Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas ha sido promovido por conferencias mundiales. En enero de 1999, tuvo lugar una conferencia en Dhaka, Bangladesh, donde se coordinó este esfuerzo global.
Formas de explotación
La trata consiste en la compra, venta y explotación de niños y adultos para diversos fines, como el tráfico de órganos o trabajos forzados. La explotación sexual es el destino más frecuente para niñas y mujeres. Los traficantes se aprovechan de situaciones como la pobreza, la falta de educación o desastres naturales para sustraer a las víctimas.
Crisis migratorias
Las crisis migratorias han sido aprovechadas por redes delictivas que actúan contra los más vulnerables. Se ha observado un aumento en los casos de desapariciones de niñas y mujeres nigerianas que parten desde Libia en busca de una vida mejor, y que pueden ser destinadas a la explotación sexual.