El alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, ha aconsejado al candidato presidencial Rodrigo Paz que limite las declaraciones de su compañero de fórmula, Edmand Lara. Según Reyes Villa, estas declaraciones han generado más confrontación que unidad. Estas afirmaciones se dieron a conocer este domingo, mientras el alcalde se prepara para definir su respaldo electoral tras los debates organizados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), que están programados para octubre.
Consejos sobre unidad
Al advertir a Paz sobre el impacto negativo que puede tener su compañero de fórmula, Edmand Lara, Reyes Villa establece un estándar claro para el apoyo que podría ofrecer. Su énfasis en la “unidad” y su rechazo a la “pelea con todo el mundo”, incluyendo a la prensa, lo posiciona como una figura conciliadora en el ámbito político. Esta crítica se convierte en una herramienta de negociación que busca exigir una campaña más moderada y constructiva del candidato que podría respaldar.
Esperando los debates
La decisión de Reyes Villa de esperar los debates del TSE antes de definir su respaldo le permite distanciarse de una alianza apresurada. Los debates, que se llevarán a cabo el 5 y 12 de octubre, serán el escenario donde los candidatos a la presidencia y vicepresidencia, deberán presentar sus propuestas para abordar la crisis económica y política que enfrenta el país. Esta estrategia le da la oportunidad de observar cómo se desempeñan ambos candidatos y justificar su elección final.
Propuestas de campaña
Reyes Villa menciona algunas de las propuestas de campaña que podrían influir en su decisión, como el precio de la gasolina a 5 bolivianos y el financiamiento de 10.000 millones de dólares a través del litio. Al condicionar su apoyo a “propuestas concretas”, obliga a los candidatos en contienda a considerar sus ideas. Esto no solo eleva su estatus en la negociación, sino que también le permite presentarse ante el electorado como un líder pragmático que busca lo mejor para el país.
Un actor estratégico
Reyes Villa se posiciona como un actor estratégico en el balotaje que se avecina. Su crítica no es simplemente un comentario; es un movimiento calculado que busca maximizar su influencia y negociar su apoyo en un momento decisivo para el país. Así, su papel en este proceso electoral se vuelve crucial, y su capacidad de negociación podría tener un impacto significativo en el futuro político de Bolivia.