El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, salió temporalmente este domingo de la residencia donde cumple una orden de prisión domiciliaria. Esta fue su primera salida desde que fue condenado a 27 años y 3 meses de prisión por golpismo. El motivo de su salida fue un procedimiento médico ambulatorio.
La salida se produjo tres días después de que se dictara la condena. Bolsonaro dejó su residencia bajo un fuerte esquema de seguridad, ya que permanece recluido desde el 4 de agosto debido a temores de fuga y por no cumplir con las medidas cautelares impuestas por el Supremo Tribunal.
Salida bajo custodia policial
El exmandatario partió escoltado por una caravana de vehículos y motos de la Policía Federal. Llegó a un hospital privado en Brasilia alrededor de las 8:00 horas, donde un grupo de seguidores lo esperaba.

El juez Alexandre de Moraes, quien está a cargo del caso de Bolsonaro, otorgó la semana pasada el permiso para que el exjefe de Estado pudiera salir. Sin embargo, deberá permanecer bajo custodia policial durante toda la salida, debido al riesgo de fuga. Además, deberá presentar un parte médico en un plazo máximo de 48 horas después de realizarse el procedimiento.
Detalles del procedimiento médico
Según la solicitud presentada por los abogados de Bolsonaro ante la Corte, el expresidente ingresará a un hospital particular en Brasilia para la extracción de dos lesiones cutáneas. Los médicos le quitarán un “nevo melanocítico en el torso”, que es un tipo de lunar benigno, así como un crecimiento anormal en el tejido cutáneo que requiere biopsia, descrito como una “neoplasia de comportamiento incierto o desconocido”.
Este procedimiento es considerado sencillo y se realizará de manera ambulatoria.

Segunda salida médica
Esta fue la segunda vez que Bolsonaro salió para un procedimiento médico desde que está en prisión domiciliaria. La primera fue el 16 de agosto, cuando abandonó su residencia para realizarse una serie de exámenes tras ser diagnosticado con síntomas de reflujo y hipo crónicos. Estas son secuelas de una puñalada que recibió en 2018, cuando era candidato a la presidencia.
Condena histórica
El jueves pasado, la Sala Primera del Supremo Tribunal de Brasil condenó a Bolsonaro a 27 años y 3 meses de cárcel por “liderar” un complot golpista con el objetivo de “perpetuarse en el poder”. Esto ocurrió tras su derrota en las elecciones de 2022 frente al actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva.
Esta condena marca un hito, ya que es la primera vez que un expresidente brasileño es condenado por intento de golpe de Estado. Durante el juicio, la Corte Suprema también declaró culpables a otros 7 reos, entre ellos exministros y antiguos jefes militares.