Un estudio reciente publicado en Nature Cities revela que la luz artificial durante la noche puede extender hasta 21 días la estación de crecimiento de las plantas en áreas urbanas del hemisferio norte. La investigación fue liderada por científicos de China, con la colaboración de expertos de Estados Unidos y Alemania, y analizó datos satelitales de 428 ciudades durante un periodo de 7 años.
Impacto de la urbanización
Los investigadores explican que la rápida urbanización está causando un aumento en la temperatura nocturna. Esto se debe a que las edificaciones y las superficies de concreto absorben y liberan calor. Además, se ha observado un incremento del 10 % en la iluminación artificial nocturna en la última década. Estos factores tienen un impacto significativo en el ciclo vegetativo de las plantas, adelantando la aparición de brotes en primavera y prolongando el colorido otoñal en las plantas urbanas en comparación con las rurales.
Influencia de la luz artificial
La luz artificial se concentra principalmente en los centros urbanos y tiene un efecto más fuerte que la temperatura del aire en la extensión del periodo de crecimiento. Este efecto es especialmente notable en el retraso del final de la estación, aunque varía según las diferentes zonas climáticas. Los datos indican que, en promedio, la estación de crecimiento comienza 12.6 días antes y termina 11.2 días después en las ciudades estudiadas en comparación con las áreas rurales.
Variaciones continentales
Estas tendencias se observan en todo el hemisferio norte, aunque con variaciones entre continentes. Por ejemplo, Europa presenta el mayor adelanto en el inicio del crecimiento, seguida por Asia y Norteamérica. Las ciudades norteamericanas tienen niveles más altos de iluminación nocturna. En ciertos climas, como los templados con veranos secos y los fríos sin estación seca, la influencia de la luz artificial es más pronunciada al inicio del ciclo vegetativo.
Consecuencias para las plantas
El retraso al final de la estación es más constante en todas las ciudades analizadas. Los autores del estudio advierten que estos cambios en el ciclo vegetativo pueden aumentar la exposición de las plantas a daños por heladas en primavera y otoño. También podrían afectar las relaciones entre las plantas y los polinizadores, además de provocar un adelanto en la aparición de alergias al polen.
Hacia un futuro sostenible
Ante el crecimiento de las ciudades y los desafíos que plantea el cambio climático, los científicos hacen un llamado a implementar sistemas de iluminación más sostenibles. Estas medidas buscan proteger mejor los árboles y sus ecosistemas asociados, fomentando así ciudades más resilientes y saludables. Además, se menciona que la transición de las lámparas de sodio a luces LED podría aumentar la sensibilidad de las plantas a la luz nocturna, aunque se requieren más estudios para confirmar esta hipótesis.
LDVY