El Gobierno boliviano ha identificado a 17 clanes familiares que están involucrados en actividades de contrabando, tanto de importación como de contrabando a la inversa. Esto incluye el traslado de ganado y productos de primera necesidad. La información fue proporcionada por Luis Amílcar Velázquez, viceministro de Lucha Contra el Contrabando, quien destacó que estos hallazgos son el resultado de un seguimiento que se realizó desde la gestión anterior.
Los datos obtenidos serán enviados a la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) para su análisis. Velázquez explicó que, según el código tributario, la exportación agravada se considera un delito. Transportar mercancías a través de pasos ilegales está penado con una condena de hasta 14 años de cárcel.
En relación con este delito, ya hay tres personas que se encuentran bajo detención preventiva en el penal de San Pedro. Además, otra persona está cumpliendo su condena con detención domiciliaria. Esta situación resalta la seriedad con la que el Gobierno boliviano está abordando el contrabando.
Investigaciones en curso
Asimismo, se están llevando a cabo investigaciones sobre otras cinco personas que están involucradas en el contrabando a la inversa de carne de cerdo. Esta información fue divulgada a través de una nota de prensa emitida por el Ministerio de Defensa.
Todo esto ocurre en un contexto de crisis económica en Bolivia, donde los precios de los alimentos y otros artículos continúan en aumento. La identificación de estos clanes familiares es parte de un esfuerzo más amplio por parte de las autoridades para frenar actividades ilícitas que afectan la economía y el bienestar social de la población.
Impacto en la economía
La lucha contra el contrabando se ha intensificado en Bolivia debido a su impacto negativo en los mercados locales. Estas actividades ilegales no solo afectan la economía, sino que también influyen en la disponibilidad de productos básicos para los ciudadanos.
/KMMN