Un informe elaborado por la Universidad de Maryland en colaboración con Global Forest Watch ha revelado que en 2024, Bolivia se posicionó como el segundo país del mundo con mayor pérdida de bosque primario. Este informe destaca que Bolivia superó a la República Democrática del Congo y solo quedó detrás de Brasil en este preocupante ranking.
Según los datos del informe, el país experimentó la pérdida de 1,8 millones de hectáreas de bosque, lo que representa un incremento del 200% en comparación con el año anterior. De esta cifra, el 81% corresponde a bosque primario, lo que subraya la gravedad de la situación.
Incendios forestales y deforestación
Por primera vez, los incendios forestales se convirtieron en la principal causa de la deforestación en Bolivia, siendo responsables del 59% de las hectáreas arrasadas. Además, el desmonte para cultivos de soya, ganado y caña de azúcar alcanzó un récord de 700.000 hectáreas, lo que agrava aún más el problema.
Departamentos más afectados
El departamento de Santa Cruz fue el más perjudicado, con daños significativos en áreas como San Matías, Urubichá, Ascensión de Guarayos, Concepción y San Ignacio de Velasco. Esta situación ha generado una gran preocupación entre las organizaciones ambientales y la población local.
Denuncias sobre la tala de árboles
El Comité de Defensa del Valle de Tucabaca ha denunciado que más de 10 millones de árboles han sido talados en los últimos años. Esta actividad se ha realizado con el aval de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosque y Tierra, además de la inacción de las autoridades locales, departamentales y nacionales.
Pérdida de bosque en otras regiones
En la región de Beni, la pérdida de bosque primario alcanzó 348.000 hectáreas. Por su parte, los departamentos de La Paz y Pando reportaron 83.000 y 29.000 hectáreas destruidas, respectivamente. Estos datos reflejan un panorama alarmante sobre la deforestación en el país.

Impacto global de la deforestación
A nivel mundial, los autores del informe señalaron que en 2024 se perdieron 67.000 kilómetros cuadrados de bosques tropicales primarios, una extensión casi equivalente a la superficie de Panamá. Esta tendencia global resalta la necesidad urgente de tomar medidas efectivas para proteger los ecosistemas forestales.
En el caso de Bolivia, el problema es especialmente grave, ya que el 75% del territorio nacional forma parte de la cuenca amazónica, que abarca más de 824.000 kilómetros cuadrados. La conservación de estos bosques es crucial para el equilibrio ecológico y la salud del planeta.