El diputado de Comunidad Ciudadana (CC), Gustavo Adolfo Aliaga, expresó su desacuerdo este jueves 15 de mayo con la decisión del Gobierno de postular formalmente al vicepresidente David Choquehuanca como candidato a secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Aliaga calificó esta acción como una burla y un movimiento político que carece de respaldo tanto diplomático como financiero.
Aliaga argumentó que la nominación es prematura y se realiza fuera de los plazos formales establecidos por la ONU. “Se trata de una burla al país. No hay convocatoria oficial del sistema de Naciones Unidas y la postulación debe contar con el respaldo del Consejo de Seguridad, algo que evidentemente no se ha gestionado”, declaró.
El diputado también recordó que para aspirar al cargo más alto del organismo multilateral se requiere una campaña diplomática extensa, que incluye visitas a varios países, respaldo político internacional y financiamiento adecuado.
El costo de la candidatura
“Generalmente, cuando hacemos una candidatura, es el Gobierno quien procede a hacer la parte de la gestión diplomática; la gestión diplomática es muy cara. Tienes que hacer una visita básicamente a todo el mundo y a una gran cantidad de países, y sobre todo tener la aprobación de los 5 miembros permanentes del Consejo de Seguridad, que son: Rusia, China, Francia, Italia y Estados Unidos”, dijo. “El lobby es muy caro, yo lo he vivido (…), es realmente perder el tiempo”, sostuvo.
Aliaga también aseguró que Bolivia no ha pagado sus cuotas pendientes ante la ONU en los últimos 5 años, acumulando una deuda de más de 700 mil dólares. “No tenemos ni recursos ni respaldo para semejante candidatura. Además, medianamente uno tiene que saber inglés, el idioma básico del Sistema de Naciones Unidas, y ¿el señor Choquehuanca ha aprendido inglés en estos momentos? Es imposible”, agregó.
Detalles de la postulación
La nominación fue comunicada por la misión permanente de Bolivia ante la ONU a través de una carta enviada a los Estados miembros, firmada en papel membretado de la Cancillería, aunque no se hizo oficial en los canales del Ministerio de Relaciones Exteriores.
La propuesta fue impulsada por el Pacto de Unidad, una alianza social y política que representa a sectores indígenas y campesinos afines al Movimiento al Socialismo (MAS).

Reacciones internacionales
Desde el ámbito internacional, la candidatura boliviana ha sido considerada poco convencional. Diversos analistas han señalado que aún no se ha iniciado el proceso formal para presentar postulaciones, el cual comenzará cuando los presidentes de la Asamblea General y del Consejo de Seguridad emitan una convocatoria oficial, prevista para finales de 2025.
La iniciativa también ha sorprendido a analistas, dado que Bolivia firmó recientemente la Declaración de Tegucigalpa en la cumbre de la CELAC, que promueve el consenso regional y el respaldo a una candidata mujer, en coherencia con el objetivo de romper con la tradición de 8 décadas de secretarios generales varones.
Expectativas sobre el nuevo secretario
“Lo que se está comentando ahora es que el próximo Secretario General debería ser una mujer. Se ha presentado la señora Bachelet (expresidente de Chile) como próxima candidata, pero hay exactamente más de 7 candidatos y a noviembre se llega casi a 15 candidatos”, señaló Aliaga.
Algunos observadores sugirieron que el objetivo de la nominación podría ser dar visibilidad internacional a Choquehuanca o brindarle una salida política de cara a las elecciones nacionales de agosto. El parlamentario de CC sostuvo que la candidatura es un pago político hacia el vicepresidente.
Defensa de la candidatura
En contraste, el senador del Movimiento Al Socialismo (MAS), Félix Ajpi, recordó que Choquehuanca fue canciller durante varios años y tiene una trayectoria relevante. Respecto al costo financiero, el senador afirmó que son opiniones tendenciosas. “El boliviano es enemigo del boliviano”, subrayó.
