La India ha decidido cerrar indefinidamente 48 destinos turÃsticos en la región de Cachemira. Esta medida se tomó tras un ataque terrorista ocurrido el 22 de abril de 2025, que dejó un saldo trágico de 26 muertos, entre ellos 25 ciudadanos indios y un nepalÃ, en la localidad de Pahalgam. Las autoridades buscan prevenir futuros incidentes en áreas que carecen de una infraestructura de seguridad adecuada.
Según un funcionario del departamento de turismo regional, que prefirió permanecer en el anonimato, de los 87 destinos turÃsticos en el Valle, se han emitido órdenes de cierre para 48 de ellos. Esta acción tiene como objetivo evitar que se repita un incidente similar al de Pahalgam. Las áreas afectadas incluyen Yousmarg, Doodpathri y el valle de Bangus. Las autoridades han reconocido que estos lugares, más nuevos o remotos, no cuentan con una infraestructura de seguridad sólida.
El ataque en Pahalgam
La masacre del 22 de abril tuvo lugar en la pradera de Baisaran, en Pahalgam. Hombres armados, que según las autoridades indias eran militantes respaldados por Pakistán, abrieron fuego contra un grupo de turistas y un trabajador local. Como resultado, 25 ciudadanos indios y un nepalà perdieron la vida. Un alto funcionario de turismo explicó a EFE que las comunicaciones de inteligencia han revelado que los terroristas están planeando más ataques. Por esta razón, las agencias de seguridad habÃan recomendado el cierre de los destinos turÃsticos que no tienen un sistema de seguridad robusto.

Impacto en el sector turÃstico
El sector turÃstico es crucial para la economÃa de Jammu y Cachemira, ya que representa aproximadamente el 7-8 % del Producto Interno Bruto del Estado. Además, emplea a cerca de 1 millón de personas, tanto de manera directa como indirecta. En respuesta a la situación, las fuerzas de seguridad han intensificado sus operaciones, realizando registros y aumentando el despliegue de tropas en y alrededor de las principales zonas turÃsticas.
Medidas de seguridad implementadas
Un oficial de policÃa aseguró que las agencias de seguridad están tomando todas las medidas necesarias para proteger a los civiles. Esto incluye la operación de búsqueda en curso y el despliegue adicional de tropas en los sitios considerados vulnerables. Las autoridades están comprometidas en garantizar la seguridad de los turistas y de la población local en esta región afectada por la violencia.