El Presidente Luis Arce denunció este jueves que su Gobierno enfrenta un boicot desde la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP). Este boicot, según Arce, está orquestado por un «matrimonio político» que incluye a Luis Fernando Camacho, Carlos Mesa y Evo Morales. El objetivo de este grupo es debilitar su administración y generar caos para adelantar las elecciones generales.
Declaraciones en Sucre
La declaración del Presidente se realizó durante el ampliado nacional extraordinario de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb) en Sucre. Durante su intervención, Arce afirmó que esta «tríada» busca crear desorden para poder adelantar las elecciones generales, lo que permitiría que políticos que actualmente no pueden ser candidatos se postulen.
En su discurso, Arce también mencionó que su gestión tuvo que enfrentar el periodo posterior al supuesto golpe de Estado que su partido denuncia. A esto se sumó la pandemia y las consecuencias económicas que trajo consigo. Sin embargo, destacó que a pesar de estos desafíos, logró reactivar la economía, hasta que «intereses personales» afectaron el crecimiento que había alcanzado.
Guerra económica y precios
El Presidente Arce denunció que su Gobierno enfrenta una «guerra económica» de precios, que tiene un trasfondo político. Esta situación es provocada por la «tríada» compuesta por Evo Morales, Carlos Mesa y Fernando Camacho, quienes buscan debilitar su gestión. Durante su intervención, Arce hizo un recuento de las adversidades que ha enfrentado su administración desde que comenzó el proceso de reactivación económica en el país.
Arce se refirió a la guerra especulativa de precios de algunos productos como el arroz, el aceite y el pollo. A su vez, destacó que el costo de los alimentos producidos por los pequeños productores no ha aumentado, lo que agrava la situación.
Supuesto Intento de golpe de Estado
El Presidente también recordó que el 26 de junio de 2024, su Gobierno enfrentó un supuesto intento fallido de golpe de Estado por parte de un grupo de militares. Sin embargo, resaltó que el Gobierno activó respuestas a problemas estructurales del país, entre los que se encuentra la caída de las reservas de gas. «Hemos hecho trabajos; desde el primer momento hemos invertido en exploración», afirmó Arce.
Iniciativas para la independencia energética
Arce destacó que, para disminuir gradualmente la dependencia de la importación de combustibles, el Gobierno ha instalado en Santa Cruz una planta de biodiésel que ya está en funcionamiento. Además, se está preparando una segunda planta en El Alto que comenzará a operar en los próximos meses.
Asimismo, reveló que durante su gestión se ha iniciado un proceso de industrialización que busca reducir la dependencia de las importaciones en el país. Estas acciones son parte de los esfuerzos del Gobierno para enfrentar los desafíos económicos y fortalecer la economía boliviana.