La Defensoría del Pueblo ha conseguido la liberación de 26 funcionarios que estaban retenidos en el edificio municipal de Challapata. Estos empleados permanecieron encerrados desde el lunes como parte de una medida de presión debido a demandas que no habían sido atendidas, entre las cuales se incluía la renuncia de dos concejales.
La intervención del Delegado Defensorial de Oruro, Juan Arroyo, fue clave para alcanzar un acuerdo entre los pobladores y las autoridades municipales. Gracias a su mediación, se logró la liberación de los funcionarios alrededor de las 14:00 horas del día martes.
Los funcionarios habían estado retenidos desde la tarde del lunes, siendo mantenidos bajo llave en una clara violación de sus derechos. Esta situación llevó a la intervención rápida de Arroyo, quien organizó una reunión entre las autoridades municipales y los movilizados.
Condiciones de los retenidos
Juan Arroyo explicó que los funcionarios pasaron la noche en el edificio municipal sin la posibilidad de moverse o regresar a sus hogares, lo que generó problemas en sus familias. La situación se tornó crítica, lo que exigió una acción inmediata por parte de las autoridades.
Agenda de trabajo
Después de una coordinación efectiva con los pobladores y sus líderes, se estableció una agenda de trabajo para abordar todas las demandas que habían quedado sin respuesta. Entre estas demandas se encuentran el control de los precios de los productos de la canasta familiar y la necesidad de realizar reuniones de coordinación con las nuevas autoridades municipales que serán designadas, como los subalcaldes.
Prevención de futuras retenciones
Como resultado de esta situación, se espera que se implementen mecanismos que eviten futuras retenciones y que se garantice el respeto a los derechos humanos en el municipio. La intervención de la Defensoría del Pueblo ha sido fundamental para restablecer el diálogo y la paz en la comunidad.