La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha manifestado su “extrema preocupación” por el aumento de la conflictividad social en Bolivia. En este contexto, la CIDH ha instado tanto al Estado como a los líderes políticos a priorizar el diálogo como medio para resolver las controversias y asegurar el respeto a los derechos humanos en medio de las recientes protestas, bloqueos y detenciones.
Advertencia sobre derechos humanos
El 8 de noviembre, la CIDH emitió una advertencia sobre los efectos que la conflictividad social está teniendo en los derechos humanos y la gobernabilidad en Bolivia. En este sentido, la Comisión solicitó al Estado que respete y garantice los derechos humanos durante las protestas, además de fortalecer los espacios de diálogo necesarios.
Garantía de manifestaciones públicas
La CIDH realizó un recuento de los eventos recientes que incluyen protestas, bloqueos, heridos y detenidos. La Comisión subrayó que el Estado tiene la responsabilidad de garantizar, proteger y facilitar las manifestaciones públicas. Esto implica que se deben agotar todas las medidas posibles para resolver los conflictos de manera pacífica y fomentar un diálogo amplio e inclusivo con todas las partes involucradas.
Prevención de violaciones a derechos
La CIDH recordó que en el pasado se han documentado graves violaciones a los derechos humanos en Bolivia, lo que resalta la importancia de prevenir la repetición de tales incidentes. La Comisión enfatizó que el Estado debe redoblar sus esfuerzos para crear espacios de diálogo genuino entre los diversos sectores de la sociedad boliviana, abarcando toda su pluralidad y asegurando la participación de todos los sectores políticos.
Responsabilidad de los líderes políticos
La CIDH también hizo un llamado a los líderes políticos para que adopten el diálogo como una vía para salir de la situación de conflictividad. Se les instó a evitar la polarización y a contribuir a la gobernabilidad democrática en el país.
Necesidad de mecanismos efectivos
La Comisión ha expresado su preocupación por situaciones anteriores en las que se han registrado graves violaciones a los derechos humanos en Bolivia. Esto subraya la necesidad urgente de establecer mecanismos efectivos que prevengan futuros incidentes similares.
