El Gobierno de Bolivia ha convocado al expresidente Evo Morales a un diálogo que se llevará a cabo este lunes en el Ministerio de Economía. El propósito de esta reunión es discutir el pliego de demandas presentado por sectores que apoyan al exmandatario. La invitación fue extendida por la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, en un contexto de creciente tensión, especialmente tras el anuncio de un bloqueo indefinido de carreteras por parte de organizaciones «evistas».
Convocatoria al diálogo
Durante una conferencia de prensa, la ministra Prada instó a Morales a participar en las conversaciones junto al Presidente Luis Arce y los ministros que manejan el área económica. «Si le interesa la economía, venga al diálogo y suspenda el bloqueo, que lo que hará es provocar desabastecimiento, obstaculizar vías y el libre tránsito del pueblo boliviano», advirtió la ministra.
Motivos del bloqueo
Este llamado a la mesa de diálogo surge después de que los sectores «evitas», tras una reunión en Sacaba, decidieran implementar un bloqueo nacional e indefinido a partir de este lunes. Entre los motivos que han expuesto, se encuentran la defensa de la «libertad, integridad y el secuestro» de Morales, así como reclamaciones sobre incumplimientos al pliego petitorio del 3 de septiembre. Este pliego aborda temas como corrupción, mala gestión pública por la crisis económica, persecución política y protección al narcotráfico.
Detalles de la reunión
La reunión está programada para las 15:00 horas en la sede del Ministerio de Economía en La Paz. El Gobierno espera que esta sea una oportunidad para resolver las diferencias y atender las preocupaciones planteadas por los sectores radicales. Sin embargo, la ministra ha recordado que intentos previos de diálogo no prosperaron debido a la ausencia de representantes del evismo.
Expectativas del Gobierno
Prada concluyó su declaración diciendo: «Si realmente el interés es plantear propuestas, las puertas están siempre abiertas al diálogo y ojalá venga. Y quedará claro que, si nuevamente no asiste, los intereses son otros». Esta afirmación resalta la disposición del Gobierno para escuchar y dialogar, a pesar de las tensiones actuales.