La expresidente Jeanine Añez ha denunciado lo que ella califica como prácticas de “tortura blanca” durante el juicio del caso Senkata. En este proceso, Añez está siendo sometida a largas audiencias, en las cuales no puede ver a sus acusadores. Además, se le ha limitado el tiempo para presentar su defensa.
Audiencias extensas y maratónicas
Añez se pronunció tras la decisión del tribunal de leer en detalle todas las acusaciones en su contra, lo que ha resultado en audiencias que se extienden por horas. Según su declaración, estas audiencias pueden durar hasta 12 horas y continuarán la semana siguiente con la lectura de las acusaciones presentadas por el Ministerio de Gobierno, la Procuraduría del Estado y el Ministerio de Justicia.
“Es la tortura planificada por el gobierno de Arce Catacora, es la ‘tortura blanca’, llamada así por el derecho internacional cuando la violencia física se traduce en obligar a una persona a sentarse 12 horas frente a una cámara sin poder ver a los acusadores. Es una violencia psicológica que implica escuchar horas de mentiras e infamias mientras ellos cobran sueldo por torturar”, expresó Añez en un mensaje publicado en su cuenta de X.
Limitaciones en la defensa
Añez también denunció que, además de esta forma de tortura, se avecina otra, ya que solo se le otorgará diez minutos para ejercer su defensa. Esto lo hará sin la asistencia de un abogado y sin haber tenido acceso a los 208 archivadores que contienen 100,000 páginas del proceso.
Criticó la decisión de limitar su tiempo de defensa a diez minutos, argumentando que debería ser irrestricta, de acuerdo con el derecho internacional y la legislación boliviana.
Cargos por genocidio
La expresidente Añez enfrenta serios cargos por genocidio relacionados con los eventos del 19 de noviembre de 2019. En esa fecha, las fuerzas estatales se enfrentaron a manifestantes en Senkata, lo que resultó en al menos diez fallecidos.