La directora de la Penitenciaría del Litoral, la cárcel más grande y poblada de Ecuador, fue asesinada este jueves en un atentado. En el ataque también resultó herido otro funcionario de prisiones que la acompañaba, según informó el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI), la agencia penitenciaria del Estado.
El atentado contra María Daniela Icaza y su acompañante ocurrió alrededor de las 18:00 horas locales (23:00 GMT) en la carretera que conecta la localidad de Daule con la ciudad de Guayaquil, donde se ubica la Penitenciaría del Litoral.
Icaza se dirigía al Hospital del Guasmo Sur, situado en el sur de Guayaquil, cuando, según reportes de medios locales, hombres armados interceptaron su vehículo y abrieron fuego. La directora se encontraba en el asiento del copiloto al momento del ataque.
Confusión Inicial sobre su Estado
En un primer momento, el SNAI comunicó que Icaza había sido trasladada con vida al hospital. Sin embargo, más tarde se confirmó su fallecimiento, lo que generó una gran conmoción en el país.
Un Patrón de Violencia
Este es el segundo asesinato de un director de prisión en un lapso de 9 días. El 3 de septiembre, Álex Guevara, director de la cárcel de Lago Agrio, en la provincia de Sucumbíos, fue asesinado en circunstancias similares.
La Penitenciaría del Litoral
La Penitenciaría del Litoral, oficialmente conocida como Centro de Privación de Libertad Masculino Guayas Número 1, es la más grande de las cinco cárceles que conforman el complejo penitenciario de Guayaquil. En este complejo están recluidos aproximadamente 12.000 presos.
Más de 6.000 de esos reclusos se encuentran en la Penitenciaría del Litoral, que entre 2021 y 2023 fue escenario de las peores masacres debido a enfrentamientos entre bandas criminales que luchaban por el control interno. Esto continuó hasta que se ordenó la militarización de estos centros a principios de año por el presidente Daniel Noboa.
Militarización y Estado de Excepción
La entrada de los militares a los recintos penitenciarios se realizó en el contexto de un estado de excepción y «conflicto armado interno» declarado por el presidente contra el crimen organizado. Este fenómeno ha contribuido al aumento de la violencia criminal, llevando a Ecuador a ser el país de Latinoamérica con la tasa más alta de homicidios, alcanzando 47,2 por cada 100.000 habitantes en 2023.
La ola de asesinatos también ha cobrado la vida de otros directores de cárceles y autoridades municipales, incluyendo varios alcaldes, así como figuras de escala nacional, como el candidato presidencial Fernando Villavicencio.
Fuente: EFE