El agua del río Sena en París no cumplía las condiciones sanitarias el pasado 17 de julio, cuando la alcaldesa Anne Hidalgo se bañó precisamente para demostrar que era apta para celebrar varias pruebas de los Juegos Olímpicos.
Según los resultados de las muestras de agua tomadas diariamente, se ha revelado que el agua del río Sena en París no cumplía con los estándares sanitarios el día en que la alcaldesa Anne Hidalgo se bañó para demostrar su aptitud para los Juegos Olímpicos. La concentración de bacterias E. coli en el punto donde se bañaron era de 985 UFC por cada 100 mililitros, superando el límite establecido por las autoridades sanitarias de 900 UFC. En otro tramo del río, la concentración llegaba a 1.017 UFC por 100 mililitros.
Mejora gradual de la calidad del agua
En las últimas semanas, los indicadores de calidad del agua han mejorado debido a la disminución del caudal del río y a las medidas tomadas para mejorar su calidad. En junio, los niveles de bacterias eran mucho más altos debido al aumento del caudal del río causado por las lluvias de primavera.
Importancia de la imagen de la alcaldesa
El baño de la alcaldesa Anne Hidalgo, que se retrasó debido a las malas condiciones del agua, tenía como objetivo despejar las dudas sobre la aptitud del río Sena para albergar algunas de las pruebas de los Juegos Olímpicos de París. Entre las pruebas programadas en el río se encuentran la natación del triatlón y los maratones de aguas abiertas, como parte de la estrategia de París 2024 para destacar los lugares emblemáticos de la ciudad.
Inversiones para mejorar la calidad del agua
Las administraciones francesas han invertido 1.400 millones de euros desde 2016 en un plan ambicioso para mejorar la calidad del agua del río Sena. Esto incluye la canalización de desagües hacia las depuradoras en lugar de verterse directamente al río, así como la construcción de depósitos gigantes para desviar el agua de lluvia y evitar la contaminación del río.
Se espera que para el verano de 2025, sea posible nadar en el tramo del río que atraviesa París, algo que no ha sido posible desde hace un siglo.
Fuente: EFE
