Este miércoles, en la ciudad de La Paz, sede del Gobierno de Bolivia, se llevó a cabo un concurso de sabores que enfrentó a vendedoras en una «guerra» de crema chantillí. El certamen gastronómico, en su segunda versión, tuvo lugar en la céntrica plaza Camacho, donde más de 40 vendedoras compitieron en grupos de cuatro en una primera fase.
La crema chantillí, un postre adoptado de Francia hace décadas, es un verdadero tesoro culinario en la ciudad de La Paz. El postre, hecho de leche evaporada, azúcar y limón, se ha transmitido de generación en generación en diferentes plazas, mercados e incluso en algunos cementerios de la sede de Gobierno de Bolivia.
La competencia por la crema chantillí más cremosa y consistente
Este concurso reunió a las vendedoras más destacadas de diferentes lugares de La Paz para determinar quién prepara la crema chantillí más cremosa y consistente. Con sus delantales blancos, protectores de cabello y guantes de látex, las «caseritas» estaban listas para comenzar a batir la leche y demostrar sus habilidades en la preparación de este delicioso postre.
El origen de la crema chantillí
La crema chantillí tiene sus orígenes en Francia, cuando en 1606 un chef hizo hervir leche y, por error, salpicó limón en la olla. La leche se cortó y formó una crema que posteriormente sería conocida como chantillí. A lo largo de los años, este postre ha sido disfrutado por generaciones en La Paz, donde ha adquirido sabores y toques únicos.
La competencia y el veredicto
Las vendedoras tuvieron 10 minutos para preparar la crema en vasos, algunos con gelatinas y otros sin ellas. Sin embargo, demostrando su destreza, lograron terminar en menos tiempo. Los jurados degustaron los vasos repletos de crema chantillí y gelatina de colores, y decidieron quiénes pasarían a la siguiente fase. Las ganadoras recibieron productos lácteos, dulces y otras golosinas como premio.
Un certamen para valorar una tradición
Las cocineras expresaron su deseo de que este certamen se lleve a cabo cada año para valorar y reconocer el postre tradicional de La Paz. La crema chantillí, que ha sido disfrutada por abuelos y bisabuelos, sigue siendo un verdadero tesoro culinario en la ciudad.
Fuente: EFE
