La sequía en el Chaco cruceño ha causado graves daños en los cultivos de maíz, impactando a más de 1.300 familias y afectando más de 8.500 hectáreas de maíz y 5.654 hectáreas de pasto.
El municipio de Cabezas ha sufrido grandes pérdidas económicas debido a la sequía, afectando a más de 48 comunidades campesinas. Según los productores locales, la pérdida de producción por hectárea se estima entre $500 y $600.
Uso de biotecnología como posible solución
Después de más de medio año de negociaciones entre el sector productivo y el Gobierno, se está evaluando la introducción de la semilla de soya HB4, que es resistente a la sequía. El ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca, ha manifestado que el análisis para aprobar esta semilla está en curso y se está llevando a cabo por el Comité Nacional de Bioseguridad.
Pedido del sector productivo
El sector productivo ha solicitado durante mucho tiempo la introducción de la semilla de soya HB4 en la actividad agrícola. Esta solicitud ha cobrado fuerza nuevamente después de la inauguración de la Planta de Biodiésel I en la ciudad de Santa Cruz.
La resistencia a la sequía como solución
La semilla de soya HB4, con su resistencia a la sequía, podría ser una solución importante para contrarrestar los efectos negativos causados por las condiciones climáticas adversas en la región del Chaco cruceño.
/APC