Por: Erick Agustin Sivila Flores / LA PATRIA
La juventud boliviana se convierte en un actor clave en un panorama económico en constante evolución, no solo como usuarios financieros sino también como agentes de cambio en el ámbito de la educación financiera, transportando sus fondos desde el ámbito personal hacia instituciones financieras.
Con una mentalidad innovadora y una sed de conocimiento, los jóvenes están redefiniendo cómo entendemos y gestionamos nuestros recursos financieros, desafiando nociones establecidas y creando nuevas oportunidades.
En esta situación, hay diversas opiniones acerca de la importancia de la educación financiera. Alondra, de 24 años, comparte su punto de vista al respecto.
“Porque (la educación financiera) ayuda a desarrollar habilidades y hábitos para optimizar su dinero, planificar sus gastos, ahorrar para sus metas y evitar un endeudamiento a lo largo”, señala.
Esta declaración resalta la importancia de la educación financiera al destacar que esta ayuda a cultivar habilidades y patrones de comportamiento que permiten a las personas administrar de manera más efectiva su dinero. Proporciona herramientas para planificar los gastos, fomenta el ahorro con miras a objetivos específicos y busca prevenir la acumulación excesiva de deudas a lo largo del tiempo.
«La educación financiera es importante porque va más allá de disponer nuestros ingresos económicos. La educación financiera no solo es ahorrar, es decir que es importante saber en qué gastar en qué invertir», indica Jorge de 24 años.
Esta afirmación resalta la trascendencia de la educación financiera al no limitarse únicamente a la gestión de los ingresos económicos. Aquí se enfatiza que esta educación no se reduce a la simple acción de ahorrar; implica comprender la relevancia de saber en qué áreas gastar el dinero y en qué oportunidades invertirlo.
Más que acumular fondos, se destaca la importancia de adquirir conocimientos para tomar decisiones informadas y estratégicas respecto al uso y la inversión del dinero, buscando maximizar su potencial y obtener beneficios a largo plazo.
Transformando la Percepción Financiera
La visión de los jóvenes bolivianos sobre educación financiera va más allá de la simple gestión de dinero. Están adoptando una mentalidad que no solo se centra en administrar lo que tienen en sus bolsillos hoy, sino en comprender cómo hacer crecer esos recursos hacia el mañana.
“(La educación financiera) me ayudaría a elaborar un presupuesto mensual para controlar mejor mis ingresos, mis gastos y evitar gastar no más de lo normal. También me enseñaría las bases de la inversión para poder hacer crecer mi dinero”, refiere Alondra.
Esta percepción resalta la utilidad de la educación financiera en dos aspectos clave. En primer lugar, enfatiza que aprender sobre finanzas ayudaría a crear un presupuesto mensual, permitiendo un control más efectivo de los ingresos y gastos. Esto garantizaría no exceder los límites habituales de gasto y contribuiría a una gestión más responsable de los recursos económicos personales.
En segundo lugar, destaca la importancia de adquirir conocimientos sobre inversión para hacer crecer el dinero. Señala que la educación financiera proporcionaría las bases necesarias para entender cómo invertir de manera inteligente y estratégica, permitiendo que el dinero genere rendimientos y crezca con el tiempo.
«La educación financiera podría beneficiar mi vida financiera con la buena forma de administrar o destinar el dinero. Ya que esto constituye a una mejor calidad de vida», indica Liz de 21 años.
Liz destaca la importancia de administrar adecuadamente el dinero, resaltando que esta habilidad contribuye significativamente a mejorar la calidad de vida. Implica que el manejo responsable y eficiente de los recursos financieros personales tiene un impacto directo en la calidad general de vida.
Lo que sugiere que una gestión prudente del dinero puede proporcionar estabilidad financiera, reducir el estrés relacionado con las finanzas y permitir el logro de metas personales, lo que en conjunto contribuye a un nivel de vida más satisfactorio.
Desde entender conceptos bancarios básicos hasta explorar las posibilidades de inversión, el su conocimiento financiero desde el nivel de supervivencia hasta el de crecimiento y desarrollo son importantes para los jóvenes bolivianos.
Innovación y Tecnología: Herramientas para el cambio
La juventud boliviana no solo está aprendiendo conceptos financieros; están abrazando la tecnología y la innovación como aliadas en su viaje hacia la alfabetización monetaria.
Aplicaciones móviles, plataformas educativas en línea y herramientas digitales están siendo aprovechadas para facilitar su acceso a información financiera clave. Estas herramientas no solo simplifican el aprendizaje, sino que también permiten a los jóvenes aplicar sus conocimientos de manera práctica en un entorno cambiante y desafiante.
Un enfoque hacia la comunidad
Además de su búsqueda individual de conocimientos financieros, la juventud boliviana requiere que se lleve la visión innovadora de la educación financiera hacia la comunidad. Talleres, charlas educativas y programas locales deben ser creados y liderados para brindar acceso a educación financiera a aquellos que podrían tener menos recursos o menos acceso a información financiera adecuada.
Para comprender mejor la perspectiva, el nivel de conocimiento actual y las necesidades percibidas de educación financiera entre los jóvenes en Bolivia. Se obtuvieron los siguientes resultados en los que se identifica áreas de mejora y orientar futuras iniciativas educativas que beneficien a esta importante población, jóvenes de Bolivia respondieron las siguientes preguntas y se obtuvieron los siguientes resultados.
El gráfico representa la distribución del nivel de conocimiento en finanzas personales entre los encuestados. En este caso, el 55% de los participantes indicaron tener un conocimiento básico en finanzas personales, lo que sugiere que poseen una comprensión fundamental pero limitada en este campo. Mientras tanto, el 45% reportó tener un nivel de conocimiento intermedio en finanzas, lo que implica una comprensión más amplia y avanzada en comparación con el grupo de conocimiento básico. Notablemente, no se registró ningún participante que afirmara tener un nivel de conocimiento financiero avanzado, lo que indica que ninguno de los encuestados se identificó con un conocimiento muy profundo o especializado en finanzas personales.
Se muestra la distribución de la educación financiera formal o informal recibida por los encuestados en el pasado. Según los datos presentados, el 15% de los encuestados han tomado un curso específico de educación financiera. Además, el 20% indicó haber recibido educación financiera durante sus estudios universitarios, mientras que el 10% la adquirió en la escuela y el 35% durante su paso por el colegio. Por último, el 20% restante señaló no haber recibido ningún tipo de educación financiera, ni formal ni informal, en el pasado.
Estos datos sugieren que una parte significativa de los encuestados ha tenido algún tipo de exposición a la educación financiera a lo largo de sus estudios, ya sea en cursos específicos, durante su educación universitaria, en la escuela o en el colegio. Sin embargo, un quinto de los encuestados no ha tenido acceso a ningún tipo de educación financiera hasta el momento de la encuesta.
El gráfico muestra la distribución de respuestas en relación con la disponibilidad de recursos o herramientas para aprender sobre finanzas en el entorno de los encuestados. Según los datos, el 60% de los encuestados indicaron que no han tenido acceso a recursos o herramientas específicas para aprender sobre finanzas en su entorno. Por otro lado, el 40% restante sí ha tenido acceso a este tipo de recursos o herramientas en su entorno.
Estos resultados sugieren que una mayoría significativa de los encuestados no ha tenido acceso a recursos específicos destinados a la educación financiera en su entorno inmediato. Esto podría indicar una carencia de recursos educativos accesibles para aprender sobre finanzas entre la población estudiada.
La interpretación de esta información indica una percepción equitativa entre los encuestados respecto a la accesibilidad y adecuación de los recursos disponibles para aprender sobre finanzas entre los jóvenes en Bolivia. El 50% de los encuestados considera que los recursos disponibles actualmente son accesibles y adecuados para los jóvenes en el país, lo que sugiere que ven una oferta suficiente y apropiada de recursos educativos financieros para su aprendizaje.
Por otro lado, el otro 50% de los encuestados opina que los recursos disponibles no son adecuados o accesibles para los jóvenes en Bolivia. Esto puede indicar que perciben una carencia o limitación en la disponibilidad de recursos educativos financieros adaptados a las necesidades de aprendizaje de los jóvenes en el ámbito financiero. Esta división equitativa en las opiniones refleja una diversidad de percepciones sobre la idoneidad y accesibilidad de los recursos actuales para aprender sobre finanzas entre los jóvenes en Bolivia.
- Mejorar oportunidades laborales (20%): Un segmento minoritario considera que la educación financiera podría mejorar las oportunidades laborales. Esto sugiere que algunos encuestados creen que tener un conocimiento más sólido en finanzas puede impactar positivamente en sus posibilidades de empleo o avance profesional.
- Tomar decisiones financieras más informadas (60%): La mayoría de los encuestados identifican la toma de decisiones financieras más informadas como el principal beneficio de la educación financiera. Esto implica que la mayor parte de los participantes ven la educación financiera como una herramienta crucial para tomar decisiones más acertadas y conscientes en el ámbito económico.
- Reducir deudas (15%): Un porcentaje menor menciona la reducción de deudas como un beneficio potencial. Esto sugiere que algunos encuestados consideran que la educación financiera puede ayudar a gestionar de manera más efectiva las deudas y evitar su acumulación excesiva.
- Conocimiento amplio sobre finanzas y su aplicación (5%): Un grupo minoritario destaca la importancia de adquirir un conocimiento más amplio sobre finanzas, incluyendo sus beneficios, ventajas, desventajas y su aplicación para hacer un mejor uso de ellas. Esto indica que algunos encuestados consideran que la educación financiera va más allá de tomar decisiones informadas, centrándose en comprender en detalle el mundo financiero para aprovecharlo de manera más efectiva.
Futuro Financiero Sólido
La juventud boliviana está haciendo más que aprender a manejar dinero; están construyendo las bases de un futuro financiero sólido y próspero. Su enfoque innovador y su voluntad de aprender y compartir conocimientos están allanando el camino para una generación que no solo es consciente financieramente, sino que también está preparada para enfrentar los desafíos económicos con confianza y destreza.
En este viaje de transformación económica y educativa, la visión innovadora de la juventud boliviana sobre la educación financiera se convierte en un faro de esperanza y cambio, iluminando el camino hacia un futuro económico más brillante y prometedor para Bolivia.
La juventud boliviana se destaca como un motor clave en el panorama financiero y educativo del país. Están transformando la manera en que comprendemos y manejamos el dinero, desafiando ideas preconcebidas y generando nuevas oportunidades.
Las opiniones de jóvenes como Alondra y Jorge subrayan la importancia de la educación financiera. Destacan cómo esta no se reduce a simplemente ahorrar, sino a adquirir habilidades para administrar dinero, planificar gastos, invertir y evitar deudas.
Aunque muchos jóvenes han recibido educación financiera, todavía existe un grupo sin acceso a ella. Además, se muestra una percepción equitativa sobre la accesibilidad de los recursos financieros disponibles, consideran que la educación financiera les ayudará a tomar decisiones más informadas, mejorar oportunidades laborales, reducir deudas y administrar sus ingresos de manera más eficiente.
La juventud boliviana no solo busca comprender el dinero de hoy, sino que también se esfuerza por aprender a hacerlo crecer para el futuro. Están adoptando la tecnología y la innovación como herramientas para aprender y aplicar conocimientos financieros.
La visión innovadora de la juventud del país sobre la educación financiera representa una oportunidad para un futuro financiero más sólido y prometedor, impulsado por una generación consciente, informada y preparada para los desafíos económicos venideros.