La Iglesia Luterana de la Navidad en Belén, en Cisjordania ocupada, montó un pesebre diferente al habitual. En lugar de colocar al Niño Jesús en un pesebre, lo colocaron entre ruinas. La imagen, que rápidamente se hizo viral, es un conmovedor recordatorio de las víctimas inocentes de la violencia en la región, que mueren cada día en la Franja de Gaza, ocupada por la ofensiva militar de Israel.
La idea del pesebre entre ruinas surgió del reverendo Munther Isaac, uno de los religiosos de la iglesia luterana. Junto a otros religiosos asegura que si Jesús hubiera nacido en este tiempo, lo haría así: entre ruinas. Isaac dijo que esta imagen le vino a la mente al ver imágenes de niños palestinos siendo sacados de las ruinas de sus hogares tras los bombardeos israelíes en la Franja de Gaza.
Mensaje poderoso y esperanzador
«Es una señal de solidaridad con nuestros niños que están muriendo cada día (…) Queremos que el mundo vea lo que está pasando aquí», aseguró Isaac.
Víctimas civiles y llamado a la acción
Según datos recientes, ya son unos 19.000 muertos (entre ellos más de 8.000 niños) las víctimas por la ofensiva israelí contra el grupo islamista Hamás; y la mayoría son civiles.
Un símbolo de paz y esperanza
El pesebre está compuesto por una figura del Niño Jesús a tamaño natural arropado con una kufiya, un pañuelo tradicional palestino. La figura está colocada sobre un montón de escombros representando las casas y vidas destrozadas por la violencia.
Luz en medio de la oscuridad
La imagen del Niño Jesús entre ruinas fue un poderoso mensaje de paz y esperanza en un momento de gran conflicto. Fue un recordatorio de que, incluso en medio de la oscuridad, siempre hay luz.
Símbolo de esperanza y justicia
Esta imagen ha sido visitada por miles de personas durante los últimos días. Muchos se conmovieron por el pesebre y lo consideraron una llamada a la acción para poner fin a la violencia en la región.
Palestinos luchando por la paz
Este pesebre entre ruinas fue un símbolo de esperanza para los palestinos que luchan por la paz y la justicia. Fue un recordatorio de que, incluso en medio de la oscuridad, siempre hay luz.