Un tribunal de apelaciones en Washington D.C. decidió este viernes atenuar la orden de silencio impuesta al expresidente Donald Trump (2017-2021) para evitar que haga ciertos comentarios sobre uno de los múltiples casos judiciales abiertos en su contra.
La corte mantuvo esa orden emitida en octubre pasado, pero señaló que no debe prohibir que el exmandatario se pronuncie sobre el fiscal especial encargado del caso, Jack Smith.
Restricciones a comentarios sobre testigos y abogados
En un documento de 68 páginas, el tribunal ratificó la decisión de la jueza Tanya Chutkan de prohibir a Trump hacer comentarios sobre testigos y abogados involucrados en el proceso que enfrenta por tratar de revertir el resultado electoral de 2020. «Estamos de acuerdo con la corte del distrito en que varios aspectos de los comentarios públicos de Trump suponen una amenaza inmediata e importante» para el proceso penal en curso, señaló la resolución.
Atenuación necesaria pero restricción excesiva
Sin embargo, destacó el escrito, la orden mordaza original limitaba mucho más discurso del necesario y no debería haber restringido los comentarios o expresiones sobre el fiscal especial.
Trump reclama violación a su derecho a expresarse
Trump se pronunció horas después en un comunicado alegando que, aunque la orden se haya atenuado, está siendo privado del «derecho otorgado por la Primera Enmienda» a expresarse en contra de «ataques a la democracia», para lo cual según él, Joe Biden es «la mayor amenaza».
Recurso ante el Tribunal Supremo
«Nos estamos convirtiendo rápidamente en un país donde decir la verdad es un delito», aseguró el expresidente, quien anunció que recurrirá el caso ante el Tribunal Supremo. Los abogados de Trump ya presentaron un recurso ante el tribunal de apelaciones después de que la jueza Chutkan emitiera la «orden mordaza» en octubre.
Cargos y juicio pendiente
El exmandatario está acusado en Washington D.C. de cuatro cargos: conspiración para defraudar a EE.UU., conspiración para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción e intento de obstruir un procedimiento oficial y conspiración contra derechos. Por el primero de esos cargos podría recibir una pena máxima de 5 años de cárcel, por el segundo y tercero 20 años respectivamente, y por el cuarto, 10 años.
Juicio programado para marzo
En el escrito de acusación se describe que tras perder los comicios del 3 de noviembre de 2020 frente al demócrata Joe Biden, el entonces presidente se embarcó en una conspiración para «revertir los resultados legítimos de las elecciones presidenciales de 2020» con denuncias falsas sobre fraude electoral y múltiples estratagemas. Se espera que el juicio comience el 4 de marzo, aunque la defensa del exmandatario está tratando por todos los medios posponer el proceso.
Fuente: EFE