Representantes de los Gobiernos de Bolivia y Chile se reunieron en un encuentro que combinó la presencialidad y la modalidad remota para abordar cuestiones consulares y migratorias que afectan a los ciudadanos de ambos países, anunció la Cancillería boliviana.
La viceministra boliviana de Gestión Consular, Eva Chuquimia, encabezó la delegación boliviana, mientras que las autoridades del Ministerio chileno de Exteriores estuvieron representadas por el director de Servicios Consulares, Eugenio del Solar, y el cónsul general de Chile en Bolivia, Fernando Velasco, entre otros.
Acciones conjuntas contra trata y tráfico ilegal
El foco de la reunión se centró en la regularización migratoria de ciudadanos chilenos en Bolivia y viceversa, permitiéndoles ejercer su derecho a la identidad. Además, se discutieron acciones conjuntas para combatir la trata y el tráfico ilegal de personas.
Convenio migratorio agiliza proceso administrativo
En septiembre, ambos países suscribieron un acuerdo en Santiago de Chile que abordaba temas de seguridad con énfasis en la lucha contra el crimen organizado y la migración irregular. Este convenio migratorio agiliza y simplifica el proceso de solicitud y entrega de residencias temporales eliminando los costos asociados para ciudadanos de ambos países.
Reunión del Comité de Frontera e Integración
La XV Reunión del Comité de Frontera e Integración celebrada en la ciudad chilena Arica en el mismo mes abordó cuestiones aduaneras, controles fronterizos integrados, lucha contra el contrabando e infraestructura vial y fronteriza entre otros temas.
Cooperación bilateral tras incidentes
Las relaciones entre Bolivia y Chile se reanudaron a raíz de incidentes ocurridos en julio, cuando dos chilenos buscaron recuperar un camión robado en Bolivia resultando uno de ellos herido. Desde entonces, ambos países han suscrito acuerdos en materia de seguridad combatiendo el robo de vehículos y la trata de personas.
Este esfuerzo conjunto representa una continuación de los lazos consulares que han persistido desde la ruptura de relaciones diplomáticas en 1978, marcando un paso significativo en la cooperación bilateral.