Pese a que hoy se celebra el Día del Trabajo, el magisterio urbano continúa con sus movilizaciones, este lunes diez maestros se crucificaron para que el Ministerio de Educación atienda sus demandas.
De igual forma, el magisterio paceño inició su novena semana de protestas, en exigencia de más presupuesto para educación, ítems y en rechazo a la nueva malla curricular.
“A pesar del maltrato a pesar del amedrentamiento, a pesar de los descuentos, a pesar de los más de 120 maestros heridos, cuatro maestros arrestados, nosotros nos ratificamos en pie de lucha y vamos a continuar en las calles”, dijo el ejecutivo nacional, Patricio Molina.
Además, el dirigente ratificó la intención de iniciar un tapiado, y recalcó que el piquete de huelga de hambre sigue vigente tras siete días.
En respuesta, el ministro de Educación, Édgar Pary, se pronunció en rechazo a las radicales medidas de presión, y aseguró que se ofrecieron 8.000 horas para cubrir el déficit histórico, informó Erbol.
“Hemos ofertado, pero la radicalidad lamentablemente no garantiza los acuerdos”, lamentó la autoridad.
No obstante, los movilizados aseguraron que la deuda histórica asciende a 700.000 horas, y que le rechazo a la malla curricular persistirá porque, supuestamente, el Ministerio de Educación improvisó todo el contenido.
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