Cinco medidas, entre ellas, estabilidad política, seguridad jurídica y democracia, propuso el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho al Presidente del Estado, Luis Arce, para superar la crisis económica del país, afirmaron este lunes el presidente de la Asamblea Legislativa Departamental (ALD), Zvonko Matkovic Ribera y el asesor de la Gobernación, Efraín Suárez.
“Vemos con bastante preocupación la situación del sistema financiero, la escasez del dólar, la angustia de la ciudadanía sobre la situación económica del país por el ocultamiento de la información real, y las dificultades de los productores y empresas para cumplir sus compromisos y con sus trabajadores”, señala una parte del documento que envió Camacho al mandatario.
Los cinco puntos de la propuesta del gobernador cruceño refieren temas sobre la democracia y la unidad en la población boliviana.
“La estabilidad económica necesita, previamente, estabilidad política y reglas claras. Esta crisis económica solo puede revertirse si nuestro país retoma el camino a la democracia y apuesta por la unidad de los bolivianos. Las dictaduras no arreglan crisis, empeoran la situación porque crean inestabilidad y división”, manifestó Camacho.
Añadió que Bolivia necesita derechos, seguridad jurídica y democracia plena para superar la crisis económica; sin perseguidos, sin presos políticos ni leyes atentatorias a las libertades ciudadanas.
Camacho recomendó atraer inversión desde las regiones después de indicar que el país está con deudas económicas.
“El Estado central ha agotado sus capacidades para atraer inversión. Hoy el Gobierno está optando por el endeudamiento, a costo muy alto, y por la enajenación de las reservas en oro, los últimos recursos que tenemos en el Banco Central de Bolivia”, señaló.
En ese sentido, propuso que las normas burocráticas se destraben para que las regiones puedan avanzar en la creación de Alianzas Público Privadas que atraerán inversiones productivas frescas y generarán empleos en las regiones.
“Se necesita un Gobierno que permita a los Gobiernos Autónomos Departamentales ampliar su capacidad de endeudamiento para obtener recursos frescos y volcarlos a la inversión pública, principalmente en provincias, que es una forma de inyectar recursos en el mercado interno”, puntualizó.
