La derrota del PSG contra el Lyon, el fin de semana por la mínima en el Parque de los Príncipes, ha puesto contra las cuerdas a Christophe Galtier. Después del naufragio de los parisinos, el accionariado se reunió con Luis Campos y pidió la destitución del entrenador. El consejero deportivo, por su parte, intentó calmar las aguas y mantuvo su apoyo al técnico francés, que podría tener los días contados en el cuadro parisino.
El PSG ya ha sufrido ocho derrotas en todo lo que llevamos de año, el doble que en todo el 2022. El equipo es un castillo de naipes y Galtier, al que se le fichó por su buen talanto para manejar vestuarios, se ha deteriorado completamente. Aunque públicamente se muestra confiado respecto a su continuidad, la realidad es que la situación puede cambiar en cualquier momento, sobre todo por el descontento de Qatar con los últimos resultados. Según Le Parisien, ninguna decisión se ha tomado al respecto, pero la reflexión sobre la destitución de Galtier existe. El próximo partido, el sábado frente al Niza, podría jugar un papel decisivo en el futuro del exentrenador precisamente de ‘les aiglons’. Si el PSG pierde, Qatar podría fulminarle, mientras que si el equipo da una buena imagen y consigue los tres puntos, todavía tendría un margen, mínimo, de seguir en el banquillo hasta el final de temporada.
Otro de los condicionantes es la relación de Galtier con Luis Campos. El portugués fue el que decidió ficharle para el banquillo, después de varias temporadas prolíficas en el Lille, pero la confianza se ha ido estropeando con el paso de los meses. El PSG es un equipo que desgasta. Lo sabe bien Campos, cuyo puesto podría estar en peligro en el caso en el que el club, que cuenta con seis puntos de ventaja respecto al segundo clasificado, termine cediendo el liderato de la Ligue 1.
Según informó Le Parisien, a Galtier no le gustó que el luso bajara a los vestuarios en el descanso de la derrota contra el Mónaco, ni tampoco ante el Lille, en un partido que acabó ganando el PSG, pero una de las imágenes la dejó el consejero deportivo recriminando a los árbitros sus decisiones.
El PSG busca un entrenador, ya sea para la próxima temporada o para que acabe el presente curso. Lo que queda claro es que, salvo milagro, el marsellés no continuará ejerciendo sus funciones.