Los 21 juzgados disciplinarios a nivel nacional serán renovados por decisión del Consejo de la Magistratura. También dispondrá la liquidación administrativa de las actuales autoridades y emitirá una convocatoria para llenar los cargos con personal idóneo.
La decisión fue tomada tras evidenciar deficiencias en la gestión de los juzgados en las intervenciones efectuadas, tal es el caso de la retardación de justicia.
El presidente del Consejo de la Magistratura, Marvin Molina, dio la información, a tiempo de señalar que también se cambiará al personal de apoyo de los juzgados, reportó la red Erbol.
“Sobre todo con los hallazgos que hemos encontrado en el proceso de intervención de los 21 juzgados disciplinarios, el pleno del Consejo de la Magistratura ha tomado la determinación de renovar el 100% de los jueces disciplinarios en nuestro país y el personal de apoyo que estas unidades administrativas disciplinarias tienen”, manifestó.
Deficiencias encontradas en juzgados del país
Molina mencionó que entre las deficiencias encontradas en la intervención resalta que de 40 expedientes revisados del juez disciplinario 3º de La Paz, 12 tenían indicios de responsabilidad.
Asimismo, en Santa Cruz, el juzgado disciplinario 1º tenía 115 expedientes observados de 120 revisados, en Tarija el juzgado 1º tenía observaciones en los 158 expedientes sujetos de intervención.
Jueces continuarán en sus funciones
Explicó que para no dejar al país sin justicia disciplinaria, se dispuso que los jueces sigan en funciones mientras se realiza el proceso de institucionalización, pero si se instruirá que se haga su liquidación.
“Vamos a emitir instructivos desde la Dirección Nacional de control y Fiscalización, para que ellos (los jueces disciplinarios) ingresen en un proceso de liquidación y no dejen cuentas pendientes”, señaló.
Estimó que la subsiguiente semana se emitiría la nueva convocatoria para renovar a los juzgados disciplinarios. Aclaró que no todos los jueces son malos, por lo que están en la libertad de someterse al nuevo proceso de institucionalización.
Instó a que no exista algún “contubernio” entre amistades de jueces, que puedan obstaculizar el proceso.
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