Fue el ejecutivo nacional de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales Originarias de Bolivia, Esteban Alavi, quien amenazó en la víspera con iniciar acciones legales contra quienes acusen a su sector de ser avasalladores.
Por tal motivo, el representante Intercultural exige pruebas para sustentar las denuncias que pesan contra sus integrantes en diferentes regiones del país.
Asimismo, negaron que el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) favorezca a su sector y desampare a la colonia menonita Valle Verde en San José de Chiquitos, del departamento de Santa Cruz y apuntan a “la derecha” como responsable de las acusaciones con el fin de dividirlos, según reporte de radio Fides.
“La familia intercultural tiene su límite, están tratando de dividirnos y no lo conseguirán porque esta organización es estructurada”, manifestó Alavi exhortando a las autoridades del INRA a brindar los informes sobre los terrenos en disputa.
La jornada anterior, un fuerte contingente policial retornó a la comunidad Valle Verde, del municipio de San José de Chiquitos, y empezó a desalojar a las 23 familias menonitas que vivían en el lugar.
De esa manera, el abogado de los menonitas, Alejandro Altamirano denunció que el desalojo fue ejecutado sin la presencia de los representantes de Derechos Humanos ni de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia.
La mañana del miércoles, el director nacional del INRA, Eulogio Núñez anunció que el proceso de desalojo continuará en Valle Verde al explicar que los menonitas «se expandieron más de lo permitido y avasallaron tierras fiscales», las cuales tenían autorización de asentamiento para otra comunidad campesina, denominada «19 de Noviembre».
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