Falta menos de tres semanas para el partido entre el PSG y el Real Madrid por octavos de final de la Champions League, y el entrenador del cuadro parisino, Mauricio Pochettino no tiene certezas si podrá contar con la totalidad de la plantilla.
La última lesión de Ramos, esta vez por una distensión en el gemelo, ha provocado que el técnico argentino tenga que preparar la contienda sin varios de los jugadores que a priori, deberían marcar las diferencias en la misma.
El primero de ellos es Neymar. El brasileño se lesionó en el tobillo el pasado 28 de noviembre y todavía no ha vuelto a los terrenos de juego. Aunque tanto el mediapunta como su entorno transmiten confianza, la realidad es que ni Pochettino ha podido confirmar su presencia ante el Real Madrid.
Primero tiene que recuperarse de una lesión que no es sencilla y después debe probarse en la Ligue 1 para ver si está en óptimas condiciones de competir. Salvo sorpresa de última hora, el exjugador del Barcelona no debería volver, a priori, antes del partido ante el Rennes el 12 o el 13 de febrero.
Si lo de Neymar es una incógnita, lo de Ramos tampoco invita al optimismo. Tras haber debutado como titular en el Parque de los Príncipes y tras haber anotado su primer gol con el PSG, el español cayó lesionado el pasado jueves. Según informó la institución francesa, Ramos sufre una distensión en el gemelo que le obligará a hacerse nuevas pruebas a lo largo de esta semana. Al ser preguntado en rueda de prensa, Pochettino no pudo asegurar si estará disponible en los octavos de la Champions contra el Real Madrid. Entretanto, la buena noticia para el PSG es que Achraf cayó eliminado de la Copa de África este domingo, por lo que el marroquí jugará el próximo partido contra el Lille. La única duda que tiene en estos momentos Pochettino es la de la portería. El argentino ha seguido una política de apaciguamiento a lo largo de la temporada, alternando a Donnarumma y Keylor Navas bajo palos, pero para los partidos de Champions, deberá elegir entre uno de los dos.