El expresidente, Carlos Mesa, señaló que la situación que atraviesa el alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, es una “manipulación grosera” que realiza el Poder Ejecutivo, además de una presunta persecución política.
A criterio del expresidente, esta persecución la puede sufrir el Gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho o el alcalde de La Paz, Iván Arias, ya que “se encuentran en la mira” del Gobierno.
Caso Sillar Alternativo
El 20 de septiembre, el Tribunal de Sentencia de Cochabamba emitió el mandamiento de condena contra el exprefecto y alcalde Manfred Reyes Villa, condenado a cinco años de prisión por el caso “Sillar Alternativo”.
Este caso se remonta a la gestión de Reyes Villa como prefecto, en la que se aprobó la construcción del tramo El Sillar, vía Cochabamba-Santa Cruz, acusándolo de supuesto incumplimiento de deberes y conducta antieconómica.
Audiencia de Manfred
“Es increíble la manipulación grosera, descarada que hace el Poder Ejecutivo del Tribunal Constitucional en este caso (de Reyes Villa), que ya han perdido todo pudor”, aseveró Mesa.
Asimismo, aseveró que no se puede juzgar a alguien en ausencia, lo cual ocurrió con Reyes Villa.
“El proceso en sí mismo no puede ser aceptado como un hecho jurídico legal, como un hecho jurídico legítimo”, añadió.
Recalcó que desde el Tribunal Constitucional Plurinacional se afirmó que para una audiencia es necesaria la presencia de la parte acusada.
“El propio Tribunal Constitucional se pronunció con claridad, indicando que no se puede juzgar a nadie en rebeldía, es decir en ausencia, y curiosamente entre los documentos del Tribunal Constitucional resulta que ese fallo se perdió”, explicó el exmandatario.
Mesa señaló que se trata de una “manipulación descarada” que hace el Gobierno para instrumentalizar la justicia en contra de quienes considera opositores, según reporte de la agencia nacional de noticias ANF.
“Creen que nos chupamos el dedo, dice que se perdieron los documentos, que se perdieron las firmas, que se perdieron las declaraciones, y alegan que como se perdió, ahora no tiene vigencia”, sostuvo.
El también líder de Comunidad Ciudadana indicó que por esa razón se ratifica en que el caso del alcalde de Cochabamba es una cuestión política.
“Es un caso obviamente de persecución política, judicialización de la política a título de corrupción”, finalizó.
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