“Solo en Oruro es danza de la Diablada y en otras partes del mundo es Danza de Diablos. Esta distinción es fundamental para comprender los procesos y características propias que se le han dado al diablo en cada territorio como es el caso de Oruro”, señalaron el viernes mediante un manifiesto, los miembros del Comité Departamental de Etnografía y Folklore.
Dicha entidad que es parte, de acuerdo a la Ley 602, de la organización del Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, se pronunció en relación a la resolución del Viceministerio de Patrimonio Cultura e Industrias Culturales del Ministerio de Cultura de la República del Perú, promulgada el 16 de septiembre, que declara patrimonio cultural de la nación a la danza de la “Diablada Puneña”.
MANIFIESTO
Ante esa situación, el Comité de Etnografía y Folklore señaló entre los varios puntos del manifiesto, que la Danza de la Diablada de Oruro, tiene un proceso histórico diferente con elementos estructurados a lo largo de los siglos y con información documentada.
Los antecedentes vienen de tiempos inmemoriales vinculados a expresiones autóctonas y mestizadas en la colonia hasta consolidar una estructura propia en el siglo XIX y siglo XX. La Danza de la Diablada en ese tiempo no tenía procesos institucionales, sino que acompañaba en la fiesta religiosa de la Virgen del Socavón a través del Pasante. La institucionalidad de la Danza de la Diablada se remonta a 1904, atribuida al gremio de los mañazos, que tomaron la responsabilidad de continuar con la expresión cultural del gremio de los artesanos y de los mineros.
Establecieron que la expresión de la Danza de la Diablada de Oruro es estrictamente cultural dedicada a la Virgen del Socavón cuya esencia siempre ha sido religiosa.
“Como fruto del proceso de colonización la figura del diablo se extendió a lo largo de todo el continente americano adquiriendo una identidad propia en cada territorio. En el caso de Oruro el Diablo ha adquirido características propias que han llevado a denominar su manifestación cultural como Diablada como se constata en el Diccionario de la Real Academia Española”, resaltaron.
Las expresiones de la danza de diablos de Puno tiene un origen diferente, que recibió influencia de la danza de la Diablada de Oruro en visitas ocasionales desde 1911 de instituciones que representaban dicha danza.
En este proceso de visitas se asimilaron y tomaron elementos propios de la Diablada Orureña, inicialmente artesanales como trajes bordados con escudo del Perú cuya finalidad era establecer una relación con el espacio peruano, caretas que se elaboraron para sustituir a las máscaras y pañuelos bordados que el diablo de Puno no tenía, y las bandas de música que coadyuvaron a la entrada de aquella Festividad. “La Declaratoria de Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, ha colocado en la palestra mundial las 18 especialidades de danza, desde la proclamación el 18 de mayo de 2001 e inscrita en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de acuerdo a la convención de 2003 para la Salvaguarda del Patrimonio cultural Inmaterial”, indicaron en otro de los puntos del manifiesto.
Puntualizaron que la Danza de la Diablada y otras expresiones culturales del Carnaval de Oruro, generaron influencia en otras regiones geográficas tanto en el país como en el exterior, caso de la Fiesta de la Candelaria de Puno.
“El Comité Departamental de Etnografía y Folklore insta a las entidades públicas llamadas por ley a nivel municipal de Oruro, departamental y Nacional a tomar acciones de salvaguarda con particular énfasis en medidas de preservación, protección y promoción del Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado Plurinacional de Bolivia, así como del Departamento de Oruro como es el caso de las danzas de la Diablada, la Morenada y otras expresiones de similar índole”, subrayaron.
