Una persona fallecida y diez se encuentran desaparecidas tras un derrumbe en el cerro del Chiquihuite, que ha sepultado la tarde de este viernes a una decena de casas en Tlalnepantla, en el Estado de México, informó la Protección Civil de la localidad. Los desaparecidos son seis adultos y cuatro menores de edad.
El rescatista en la Brigada de Rescate Topos Tlaltelolco (Topos), Fernando Álvarez, explicó que en este momento los equipos de salvamento están evaluando la mejor manera para encontrar a las personas desaparecidas tras el derrumbe.
“Las rocas pesan varias toneladas y llegaron a tres edificios, se está viendo cómo se pueden retirar sin causar mayor problema, no se sabe si se van a intentar mover o se va a proceder a demolerlas. Los desaparecidos pueden aumentar, aún es pronto para dar datos precisos”, señaló Álvarez.
Sobre el terreno trabajan personal de la Guardia Nacional, Protección Civil, bomberos, Topos y vecinos voluntarios, reportó el diario El País.
El gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, mediante su cuenta de Twitter dijo que los cuerpos de emergencia se encuentran trabajando en la zona “en coordinación con autoridades federales y municipales”.
Asimismo, pidió a la población no acercarse a la zona para no dificultar la tarea de los equipos de rescate, ya que en el lugar opera una retroexcavadora y dos camiones de volteo como apoyo en las labores de auxilio.
“Se sintió una vibración muy fea, más que el otro día con el temblor. Yo creo que ha sido una cosa del terremoto, además ha estado lloviendo mucho últimamente”, declaró uno de los vecinos de la zona
El municipio ha habilitado por el momento tres albergues temporales para las familias afectadas: El Comedor Comunitario el Puerto, El Deportivo Caracoles y La Parroquia Sagrado Corazón de Jesús.
El cerro pertenece a la Sierra de Guadalupe, una cadena montañosa en el norte del Valle de México (centro) que incluye el Cerro Tepeyac, donde se encuentra la Basílica de la Virgen de Guadalupe, lugar de peregrinación en el norte de la capital.
En las faldas del cerro fueron construidas veinte colonias populares, que con frecuencia son alertadas del peligro de deslizamientos rocosos o deslaves en tiempos de lluvias persistentes, como las que ha soportado el centro del país en las últimas semanas.
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