El sector lechero atraviesa por una crisis debido a la falta de mercados y la competencia de productos de contrabando, lo que ocasiona un “sobre stock” de leche en polvo de al menos 3.000 toneladas, anunció el martes 1 de junio el gerente de la Federación Departamental de Productores de Leche (Fedeple) de Santa Cruz, Eduardo Wills.
El Gerente de Fedeple en contacto con Página Siete indicó que el mal momento por el cual pasan, es debido a que los mercados están “inundados” de productos de dudosa procedencia, en desmedro de la industria nacional.
Expresó que esa situación significa y obliga a buscar mercados de manera rápida para acomodar la producción, exportándola o generando políticas de consumo interno, ya que ese “sobre stock” debilita la posibilidad de seguir produciendo.
Según Wills, actualmente el país produce aproximadamente 1,9 millones de litros de leche al día, cifra que en una situación ideal, no alcanzaría a cubrir la demanda del país, pero debido al bajo consumo y la competencia desleal del contrabando se convierte en una carga para los productores, que deben buscar nuevos mercados.
Exportaciones
El empresario también aclaró que actualmente los productores y la industria lechera buscan mercados para la leche boliviana, destinando aproximadamente el 25 por ciento de la producción a la exportación, que actualmente se concentra en los países de la Comunidad Andina de Naciones (CAN).
“Hemos tenido en el pasado problemas para exportar. Nuestro mercado natural es la CAN donde tenemos preferencias arancelarias que nos permiten ser un poco más competitivos respecto a la leche que proviene del Mercosur, donde preponderan los grandes productores”, indicó.
Añadió que a esa situación se suma la pandemia por el coronavirus en Bolivia, originando la caída en la provisión de leche para el desayuno escolar.
Acciones por realizar
El representante de la Fedeple señaló la necesidad de trabajar con municipios de todo el país para controlar el expendio de productos lácteos de contrabando en los puntos de venta.
“No solo provoca una competencia desleal a los productores nacionales, sino que al no contar con las certificaciones sanitarias, pueden constituirse en un peligro para la salud pública”, indicó.
Asimismo, resaltó que se requieren programas sociales para que la población en conjunto acceda a la leche y sus derivados.
“Por ejemplo, pueden impulsarse programas de refrigerios con ración de leche para los policías, militares y magisterio de modo que se pueda ampliar la demanda interna”, puntualizó.
El consumo de leche subió de 42 a 64,5 litros por persona
En un acto que se realizó por el Día Mundial de la Leche, que se celebra el 1 de junio de cada año, el Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, y Pro Bolivia informaron el martes que en Bolivia el consumo per cápita de leche por año subió a 64,5 litros por persona.
“En Bolivia el consumo per cápita el 2011 era de 42 litros por persona; sin embargo, desde el 2012 con la vigencia del Fondo de Apoyo al Complejo Productivo Lácteo (Proleche), el consumo per cápita en 2020 subió a 64,5 litros por persona”, indicó el ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Néstor Huanca.
La autoridad convocó a la población a consumir productos lácteos, por su alto valor nutricional.
/AAC/
